Francia está considerando la reintroducción del servicio militar, un tema que ha cobrado relevancia tras las controvertidas declaraciones del general Mandon. Este oficial sugirió que, para enfrentar una posible guerra con Rusia, era necesario «aceptar la pérdida de los hijos». Estas afirmaciones han llevado al gobierno de Emmanuel Macron a evaluar la necesidad de un cambio en la política de defensa del país.
La discusión sobre el servicio militar no es exclusiva de Francia. En toda Europa, varios países han adoptado diferentes enfoques frente a la conscripción y la preparación militar. Mientras algunos han optado por mantener fuerzas armadas profesionales y voluntarias, otros han restablecido sistemas de servicio militar obligatorio o han considerado su implementación.
Políticas de defensa en Europa
En países como Suiza y Noruega, el servicio militar es un requisito, lo que implica que todos los ciudadanos deben cumplir con un período determinado de servicio. Suiza, por ejemplo, ha mantenido un sistema de milicia que permite a los soldados realizar su formación y servicio sin dejar de lado sus actividades civiles. En contraste, países como Alemania han abolido el servicio militar obligatorio desde 2011, enfocándose en un modelo de fuerzas armadas completamente profesionales.
La situación actual en Europa está marcada por un aumento de las tensiones geopolíticas, especialmente en relación con Rusia. Las agresiones en Ucrania han hecho que muchos países reconsideren su postura defensiva. Esta situación ha llevado a algunos gobiernos a reactivar debates sobre la conscripción, así como a aumentar sus presupuestos de defensa.
El contexto de la reintroducción en Francia
El anuncio del general Mandon ha generado un intenso debate en la sociedad francesa y ha puesto de manifiesto las preocupaciones sobre la seguridad nacional. Aunque el gobierno no ha tomado una decisión definitiva al respecto, la idea de un retorno al servicio militar se alinea con la creciente necesidad de preparar a la población para una posible crisis bélica. Macron, en su búsqueda de fortalecer la defensa nacional, podría considerar esta medida como una forma de aumentar la resiliencia del país ante futuras amenazas.
Así, la reintroducción del servicio militar en Francia, impulsada por la inquietud de los conflictos en Europa, se encuentra en el centro de un debate que podría redefinir la estructura de las fuerzas armadas y la percepción de la defensa entre los ciudadanos.
