El Oktoberfest de Múnich, uno de los festivales de cerveza más emblemáticos del mundo, ha reabierto sus puertas al público en la tarde de este miércoles tras ser clausurado por la policía debido a una supuesta amenaza de bomba. Esta medida se tomó a raíz del descubrimiento de artefactos explosivos y una carta en un edificio cercano, donde una explosión había tenido lugar, provocando la muerte de un hombre y dejando a su hija de 21 años y su madre de 81 años gravemente heridas y hospitalizadas.
Según ha informado Europa Press, las autoridades policiales han concluido que la situación se relaciona con una disputa familiar y han descartado, por el momento, cualquier vínculo con grupos políticos o movimientos antifascistas, a pesar de algunos rumores al respecto. La policía de Múnich ha comunicado a través de sus redes sociales que, tras investigar la amenaza, esta no ha sido confirmada, permitiendo así la reanudación del festival en el parque de Theresienwiese.
Detalles sobre la explosión y la investigación
La explosión que tuvo lugar en un edificio cercano al festival ha generado una gran preocupación entre los asistentes y la comunidad local. Las fuerzas de seguridad han intensificado sus operativos en la zona, pero tras la evaluación de la amenaza, se han retirado, sintiendo que la situación está controlada. La investigación sigue activa para esclarecer todos los detalles de lo ocurrido y asegurar la seguridad de los ciudadanos.
El Oktoberfest, que atrae a millones de visitantes cada año, se celebra en un ambiente festivo y familiar, donde la cerveza, la gastronomía bávara y las tradiciones juegan un papel central. La reanudación del evento es un alivio tanto para los organizadores como para los asistentes, quienes esperaban disfrutar de la celebración a pesar de las circunstancias adversas.
Un festival en medio de la incertidumbre
A pesar de la reanudación del Oktoberfest, la atmósfera de incertidumbre persiste entre los asistentes. Las autoridades locales han instado a los ciudadanos a permanecer atentos y reportar cualquier actividad sospechosa. En un evento de tal magnitud, la seguridad es primordial, y la reciente amenaza ha recordado a todos la importancia de mantener la vigilancia en lugares públicos.
Las autoridades seguirán informando sobre la situación a medida que avance la investigación, y se espera que el Oktoberfest continúe ofreciendo un espacio de diversión y entretenimiento, mientras se garantiza la seguridad de todos los presentes.
