El Atlético de Madrid ha conseguido una victoria decisiva ante el Real Betis por 0-2 en el Estadio Benito Villamarín, destacándose por un juego cohesionado y efectivo que deja al equipo en la cuarta posición de LaLiga con 19 puntos.
Un inicio fulgurante y control absoluto
El guion del encuentro se rompió rápidamente. Apenas transcurridos 3 minutos, Giuliano Simeone cazó un rechace en el borde del área y, con sangre fría, cruzó el balón a la red, estableciendo el 0-1. Este golpe temprano dejó al Betis sin respuestas durante gran parte de la primera mitad. Aunque el conjunto verdiblanco intentó recuperar el control, su 57% de posesión no se tradujo en oportunidades, apenas generaron un disparo a puerta. El Atlético, por su parte, mostró una actitud más vertical, defendiendo con solidez y saliendo al contraataque con peligro en cada ocasión.
Cuando el descanso se acercaba, Álex Baena apareció para marcar un auténtico golazo en el minuto 46, culminando un contragolpe que dejó al Betis desmoralizado. Con un 0-2 en el marcador, el conjunto local se retiró al vestuario impotente, mientras que el Atlético se fue al descanso disfrutando de su ventaja y del control del ritmo del juego.
Resistencia y tácticas efectivas en la segunda mitad
Tras el descanso, el Betis intensificó su juego, buscando ampliar el campo y presionar al Atlético en su área. Sin embargo, a medida que avanzaba la segunda parte, la falta de claridad en los últimos metros fue evidente, lo que generó una creciente ansiedad. La mejor ocasión del Betis llegó con un disparo al larguero de Abde en el minuto 60, aunque fue insuficiente para cambiar el curso del encuentro.
En el minuto 55, Pablo Barrios solicitó el cambio por molestias musculares, lo que llevó a Diego Simeone a reforzar el centro del campo y cerrar filas para asegurar el resultado. A partir de ese momento, el Atlético manejó los tiempos del partido con maestría, manteniendo un control total de los espacios y frustrando los intentos del Betis. El equipo de Simeone se mantuvo fiel a su estilo defensivo, con un bloque compacto y transiciones rápidas y efectivas, logrando así una victoria convincente.
El plan táctico de Simeone demostró ser acertado, mientras que Manuel Pellegrini, entrenador del Betis, enfrentó dificultades para encontrar soluciones. El planteamiento 4-2-3-1 del Betis no logró romper la sólida defensa colchonera, y cada pérdida de balón se convirtió en un riesgo que el Atlético supo castigar con precisión.
La actuación de Álex Baena fue crucial, no solo por su gol al filo del descanso, sino también por su creciente influencia en el equipo. Giuliano Simeone también tuvo un partido destacado, mostrando un trabajo incansable en la presión y estableciendo el camino con su gol inicial. Por su parte, la lesión de Barrios podría generar preocupaciones en la plantilla rojiblanca, pero el equipo ha demostrado solidez defensiva y efectividad en ataque.
La victoria del Atlético de Madrid marca un hito importante, logrando su primer triunfo fuera del Metropolitano, mientras que el Betis se enfrenta a un tropiezo preocupante que pone en riesgo su lucha por los puestos europeos. El próximo reto para ambos equipos será crucial, especialmente para un Betis que necesita reencontrar su eficacia ofensiva.
