El Gobierno de Estados Unidos ha decidido **congelar todos los visados de visitante** para personas provenientes de Gaza, una medida que se produce un día después de que la influencer ultraderechista **Laura Loomer** compartiera videos de niños palestinos gravemente heridos que llegaban al país para recibir atención médica. Loomer, conocida por sus posturas extremas, calificó a estos niños de «invasores terroristas», lo que desencadenó una respuesta inmediata del **Departamento de Estado de EE. UU.**.
La suspensión de la emisión de visados es un golpe devastador para muchas familias que buscan atención médica urgente para sus hijos, ya que esta medida prácticamente cierra una vía que permite a los menores recibir cirugías y prótesis que no están disponibles en la **Franja de Gaza**. Según el Departamento de Estado, se llevará a cabo «una revisión completa y exhaustiva» de los casos médicos y humanitarios recientes, aunque muchos críticos consideran que esto es un intento de justificar la decisión.
El secretario de Estado, **Marco Rubio**, ha tratado de enmarcar esta suspensión como una simple revisión de procedimiento. Sin embargo, las declaraciones de Loomer, quien celebró públicamente la decisión del gobierno, sugieren que la medida es una respuesta directa a su campaña. «Es una noticia fantástica… Esperemos que todos los habitantes de Gaza se sumen a la prohibición de viajar del presidente Trump», escribió Loomer, quien también instó a la administración a tomar más medidas contra lo que ella describe como «invasión».
Reacciones de organizaciones humanitarias
La organización sin fines de lucro **HEAL Palestine**, que ha trabajado para llevar a niños heridos a Estados Unidos, expresó su angustia ante esta decisión. «Nuestra misión da a los niños una nueva oportunidad de vida… Los dólares de los contribuyentes estadounidenses no financian este tratamiento», afirmaron. El **Fondo de Ayuda a los Niños de Palestina (PCRF)** también calificó la decisión como «peligrosa e inhumana», advirtiendo que las evacuaciones médicas son esenciales en medio del colapso del sistema sanitario de Gaza, que ha sido severamente afectado por el conflicto.
La congelación de visados se produce en un contexto de creciente violencia en la región, donde el primer ministro israelí, **Benjamin Netanyahu**, intensifica sus acciones militares. Informes recientes han documentado el uso del hambre como método de guerra, bloqueando el acceso a alimentos, agua y ayuda humanitaria a la población de Gaza.
Un contexto alarmante
El 18 de agosto, medios de comunicación israelíes difundieron un audio del exjefe de inteligencia militar, **Aharon Haliva**, en el que se refería a la necesidad de «una Nakba de vez en cuando». Estas declaraciones han sido interpretadas como evidencia de la lógica genocida que guía la política israelí. La decisión del Gobierno de EE.UU. no solo representa un acto de crueldad burocrática, sino que también se enmarca dentro de una estrategia más amplia de deshumanización de los palestinos.
A pesar de este panorama oscuro, las protestas en ciudades como Nueva York y Londres siguen creciendo, reflejando el rechazo global al genocidio. La comunidad internacional enfrenta un dilema: aceptar políticas de guerra y racismo o levantarse para luchar por la justicia. Se requiere una acción colectiva y sostenida para poner fin a la violencia y garantizar un futuro donde los niños palestinos puedan vivir, sanar y prosperar.
