Los aeropuertos españoles han logrado mantener su operativa «con normalidad» tras el ciberataque que afectó a la empresa Collins Aerospace, proveedor de servicios de facturación y embarque, el pasado viernes por la tarde. Este ataque ha tenido un impacto significativo en otros aeropuertos europeos, como los de Berlín y Bruselas, que aún sufren las consecuencias durante este domingo.
Según fuentes de Aena, la red de aeropuertos españoles no se ha visto afectada por este incidente, lo que ha permitido que los vuelos desde y hacia Bruselas, Berlín-Brandenburgo y Londres-Heathrow se realicen sin problemas. Sin embargo, en los aeropuertos europeos mencionados, las alteraciones del tráfico aéreo persisten, lo que ha generado largas colas en los mostradores de facturación debido a que los procesos de ‘check-in’ ahora deben realizarse manualmente.
Impacto en Berlín y Bruselas
En el aeropuerto de Berlín, los problemas derivados del ciberataque han sido evidentes, aunque las autoridades han informado que la situación se estaba gestionando de manera fluida. En contraste, en Bruselas, la crisis se ha agudizado con la cancelación de 44 vuelos programados para este domingo, junto a otros 28 vuelos de llegada que también se han visto afectados. Las largas filas en los mostradores de facturación continúan, a pesar de la incorporación de personal adicional para ayudar a mitigar el caos.
Las autoridades belgas han advertido que la normalización de las operaciones podría no ocurrir hasta el lunes, ya que el sistema de facturación y embarque aún no ha sido restaurado. Este retraso ha afectado a numerosos pasajeros, quienes han expresado su frustración ante la situación.
Situación en España
En España, se han registrado algunas demoras y cancelaciones puntuales en las conexiones con Bruselas en los aeropuertos de Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat. Sin embargo, fuentes de Iberia han aclarado que estos inconvenientes no se deben al ciberataque, sino a restricciones causadas por condiciones meteorológicas adversas en ciertas áreas.
En resumen, mientras los aeropuertos españoles se mantienen operativos, la situación en Berlín y Bruselas sigue siendo tensa, con un impacto significativo en los vuelos y la experiencia de los pasajeros. Las próximas horas serán cruciales para determinar cuándo se podrá restablecer la normalidad en el tráfico aéreo europeo.