El verano es la época ideal para experimentar con nuevas recetas que no solo aportan frescura, sino que también nos permiten viajar a través de los sabores. Desde la tradicional gazpacho andaluz hasta los exóticos rollitos de verano de Vietnam, cada rincón del planeta ofrece platos refrescantes y vibrantes que transforman nuestras comidas estivales en una auténtica aventura culinaria.
Gazpacho: un clásico español con un toque especial
El gazpacho es un plato emblemático de la cocina andaluza, con miles de versiones disponibles. En esta ocasión, la chef Ana Casanova propone una receta innovadora que incluye frambuesas, aportando un toque agridulce que potencia el sabor del plato. Servido acompañado de queso de cabra desmenuzado y brotes de espinacas, este gazpacho se convierte en una opción refrescante ideal para combatir las altas temperaturas.
Ensalada griega: frescura mediterránea
La ensalada griega, conocida como Horiatiki, es una celebración de los sabores del Mediterráneo. Este plato combina tomates jugosos, pepino crujiente, cebolla morada, aceitunas kalamata y queso feta, todo aderezado con orégano y aceite de oliva de alta calidad. Es una opción perfecta para aquellos que buscan ingredientes frescos y de temporada durante el verano.
Ceviche: frescura peruana en cada bocado
El ceviche es un plato insignia de la gastronomía peruana que consiste en pescado crudo marinado en jugo de lima, cebolla, cilantro y ají. Su acidez y frescura lo convierten en una elección ideal para climas cálidos. Esta versión, preparada por Ana Casanova, utiliza pez ballesta y puede incluir mariscos o frutas tropicales, ofreciendo una experiencia culinaria única que ha conquistado paladares en todo el mundo.
Ensalada Cobb: un clásico estadounidense
La ensalada Cobb tiene su origen en el restaurante Brown Derby, donde su dueño, Bob Cobb, improvisó un plato con lo que tenía en la nevera. Esta ensalada contundente incluye pollo, huevo duro, aguacate, tocino, queso azul y un aderezo especial, convirtiéndose en un elemento básico de los menús veraniegos en Estados Unidos.
Rollitos de verano: frescura asiática
Los rollitos de verano de Vietnam son una opción ligera y saludable. Preparados con papel de arroz, se rellenan con fideos de arroz, vegetales frescos, camarones o cerdo, y hierbas como menta o albahaca. A diferencia de los rollitos fritos, se sirven fríos y se acompañan de salsas de maní o hoisin, lo que los convierte en un bocado ideal para los días calurosos. Esta versión es propuesta por Manel García y Hanna Buschmann de Addicted to Hummus.
Zaalouk: un plato tradicional marroquí
El Zaalouk es una ensalada cocida a base de berenjena, tomate, ajo, comino y pimentón. Se sirve fría o a temperatura ambiente y es un acompañamiento esencial en los mezze marroquíes. Su sabor ahumado y especiado resulta reconfortante, incluso en los días más calurosos, convirtiéndola en una opción perfecta para el verano.
Pavlova: dulce frescura de Oceanía
La Pavlova, un postre originario de Australia y Nueva Zelanda, se caracteriza por su merengue crujiente por fuera y suave por dentro. Este postre, creado en honor a la bailarina rusa Anna Pavlova, se sirve con crema batida y frutas frescas como kiwi, maracuyá o fresas. La versión de Gipsy Chef ofrece un giro mediterráneo, utilizando piña y un toque de tomillo, ideal para los días cálidos.
Estas siete recetas no solo son una forma de refrescarse en verano, sino que también representan un intercambio cultural a través de la gastronomía, permitiendo que cada comida se convierta en una experiencia memorable y llena de sabor.