El canciller alemán, Friedrich Merz, rechazó de forma categórica el pasado sábado cualquier tipo de colaboración entre su bloque conservador y la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), enfatizando la importancia de resolver los problemas del país desde el centro político. Durante su intervención en el congreso anual de la Junge Union (Joven Unión) en Rust, en el estado de Baden-Württemberg, Merz subrayó que «no habrá una colaboración de la Unión con los que se hacen llamar Alternativa para Alemania».
Merz dejó claro que este rechazo no se debe a un «cordón sanitario» entre las formaciones, sino a una profunda discrepancia ideológica. «Nos separan mundos de ese partido. No tenemos nada en común con ellos», afirmó. A pesar de la realidad política actual, que presenta complicaciones tanto a nivel internacional como en la constelación de partidos, el líder conservador insistió en la necesidad de buscar mayorías políticas desde el centro.
Llamado a la colaboración entre partidos
Durante su discurso, Merz apeló a los socialdemócratas, socios de coalición, a unir esfuerzos y demostrar que es posible abordar los desafíos del país desde una perspectiva centrada. «Si lo demostramos, ya no habrá más necesidad de una alternativa para Alemania», argumentó, destacando que la tarea de hacer retroceder a la AfD no solo es responsabilidad de los conservadores, sino también del Partido Socialdemócrata (SPD).
El canciller observó que tanto su partido como el SPD han enfrentado la pérdida de votantes a favor de la formación ultraderechista, lo que hace aún más urgente la necesidad de una respuesta conjunta y efectiva. Merz reconoció que en una coalición de gobierno no siempre se puede alcanzar el ideal deseado, y que las circunstancias actuales son más complejas que en años anteriores.
Un futuro incierto para la política alemana
La situación política en Alemania se presenta desafiante, con la AfD ganando terreno y atrayendo a un electorado que tradicionalmente apoyaba a los partidos conservadores y socialdemócratas. En este contexto, Merz enfatizó que la unión y el trabajo en conjunto son esenciales para contrarrestar la influencia de la extrema derecha en el panorama político alemán.
El líder de la CDU también subrayó que su bloque buscará siempre las mayorías políticas dentro del ámbito del centro, señalando que la colaboración con la AfD no es una opción viable. La defensa de los valores democráticos y la búsqueda de soluciones efectivas a los problemas del país se perfilan como prioridades en la agenda política de Merz y su equipo.
Así, el canciller alemán concluyó su intervención reafirmando su compromiso con un enfoque centrado que busca la inclusión y el diálogo, dejando claro que la lucha contra la AfD es una cuestión de responsabilidad compartida entre todos los partidos democráticos.
