Las empresas familiares se han consolidado como el principal motor económico de las Islas Baleares, generando el 87 por ciento del empleo en el archipiélago, según un informe presentado por la Cátedra de la Empresa Familiar de Banca March. Este estudio, titulado «La empresa familiar en las Illes Balears: relevancia y supervivencia», fue elaborado por Alfredo Martín y abarca un análisis exhaustivo de 7 456 sociedades de la región.
Del total de empresas familiares, el 93 por ciento se localizan en Baleares, siendo Mallorca la que concentra el 75 por ciento de ellas, seguida de Ibiza con el 16 por ciento y Menorca con casi el 10 por ciento. El informe destaca que tres de cada cuatro de estas empresas cuentan con más de 10 años de actividad y presentan una tasa de supervivencia del 81,5 por ciento en la última década, cifra que supera la media nacional, situada en el 77 por ciento.
Impacto económico de las empresas familiares
Las empresas familiares no solo son fundamentales en términos de empleo, sino que también aportan el 81,7 por ciento del valor añadido bruto (VAB) de la comunidad. Este dato resalta su importancia en la economía balear, especialmente en un entorno cambiante y competitivo. Martín subrayó que estas empresas demuestran una notable capacidad de resiliencia y adaptación, así como una visión a largo plazo, orientando sus decisiones hacia la continuidad y estabilidad del negocio.
Durante la presentación del informe, Inés Rotger, presidenta de la Associació Balear de l’Empresa Familiar (Abef), enfatizó que las empresas familiares son esenciales para entender la realidad económica de Baleares, definiéndolas como “su motor económico”.
Reflexiones sobre el futuro
La relevancia de las empresas familiares en Baleares resalta la necesidad de seguir apoyándolas para garantizar su sostenibilidad y crecimiento. Con un entorno económico que presenta desafíos constantes, el futuro de estas empresas dependerá de su capacidad para innovar y adaptarse a las nuevas circunstancias del mercado.
En conclusión, la fuerza laboral y el valor que aportan las empresas familiares son innegables, y su contribución al desarrollo económico de Baleares marca un camino a seguir para el crecimiento en la región.
