Un conductor ha perdido la vida este lunes tras caer por un talud en la carretera C-12, justo al lado del cementerio de Balaguer (Noguera, Lleida). El trágico accidente, que tuvo lugar poco antes de las 15:30, se produjo en el kilómetro 172,5 y, según el Servei Català de Trànsit (SCT), todavía se encuentra bajo investigación. Esta muerte se suma a las 83 víctimas mortales registradas en las vías de Cataluña en lo que va de año.
Poco después del siniestro, se informó de que una persona más había resultado herida de gravedad. Cabe destacar que el lugar del accidente es el mismo donde, en mayo, falleció una pasajera tras un choque entre un turismo y un todoterreno. En aquella ocasión, la copiloto del vehículo de pasajeros perdió la vida en el mismo tramo, lo que añade un matiz aún más trágico a esta serie de incidentes en la zona.
Un mes trágico en las carreteras catalanas
Con este accidente, el mes de julio se convierte en uno de los más mortales de este año, ya que se han contabilizado 14 fallecimientos en las carreteras catalanas solo en este mes, una cifra que supera a la del mismo periodo del año anterior. En particular, Lleida ha sido una de las provincias más afectadas, acumulando ocho de las muertes registradas en lo que va de julio, lo que representa más de la mitad de las víctimas de esta comunidad.
En el contexto de la mortalidad vial, Lleida se mantiene como la tercera provincia con más víctimas en lo que va de 2025, con un total de 17 fallecimientos, solo por detrás de Tarragona (21 muertes) y muy por delante de Girona (siete) y Barcelona (37).
La siniestralidad en las vías interurbanas
Las estadísticas revelan que la AP-7 es la carretera con más accidentes mortales, con un total de diez, seguida por la A-2 y la C-58 con seis cada una. La C-12, donde ocurrió el último accidente, ha visto cuatro muertes este año, lo mismo que la N-II. En total, 32 de las personas fallecidas viajaban en turismos, mientras que otros cinco iban en furgonetas y tres en camiones.
La situación es preocupante, especialmente para los colectivos más vulnerables, ya que se han registrado tres ciclistas, nueve peatones y 25 motoristas entre las víctimas mortales. La suma de estos trágicos incidentes subraya la urgente necesidad de mejorar la seguridad en las carreteras de Cataluña para prevenir futuros accidentes.
