La obtención del carné de conducir representa un momento crucial para miles de jóvenes en España, brindando autonomía pero también requiriendo habilidades como la anticipación, el control del vehículo y la atención constante. Sin embargo, esta etapa de aprendizaje no siempre es sencilla, ya que la inexperiencia puede ser un factor determinante en la seguridad vial. Según el informe «Las principales cifras de la siniestralidad vial 2024» elaborado por la Dirección General de Tráfico (DGT), los conductores de entre 18 y 24 años son el grupo más propenso a sufrir accidentes de tráfico, especialmente durante los primeros meses de conducción.
Errores comunes y sus soluciones
En este contexto, la aseguradora Prima Seguros ha identificado algunos de los errores más frecuentes entre los nuevos conductores y ha proporcionado recomendaciones clave para evitarlos. Una de las equivocaciones más comunes es la incorrecta configuración del asiento, los retrovisores y el volante, lo que puede afectar la visibilidad y la maniobrabilidad del vehículo. Se sugiere dedicar un minuto a ajustar la postura y la distancia antes de iniciar la marcha para optimizar la capacidad de reacción.
Asimismo, muchos jóvenes alternan entre una excesiva prudencia y una confianza desmedida, lo que puede llevar a situaciones riesgosas. Para ello, es aconsejable realizar trayectos cortos en áreas conocidas y practicar durante horas de poco tráfico. Otro error habitual es la falta de atención a lo que ocurre en la vía, ya que muchos se centran únicamente en su propio coche, lo que dificulta su capacidad para reaccionar a frenazos o cambios de carril. Mantener la vista en el entorno y anticiparse a los movimientos de otros vehículos es fundamental.
Distracciones y conducción nocturna
El uso del móvil continúa siendo una de las principales causas de accidentes en España. Para evitar distracciones, se recomienda configurar el dispositivo antes de iniciar la conducción y optar por listas de reproducción de música suaves que no generen sobresaltos. La falta de práctica real en situaciones básicas como el aparcamiento o las rotondas también puede generar inseguridad. Por ello, es conveniente buscar momentos de baja intensidad de tráfico para practicar sin presión.
La DGT destaca que el 44% de los fallecimientos de jóvenes en carretera ocurre durante la noche, cuando la visibilidad es reducida y se acumula el cansancio. Por esta razón, se aconseja evitar los primeros trayectos nocturnos hasta ganar confianza en condiciones diurnas. Además, el miedo a sufrir un percance genera gran presión en los nuevos conductores, por lo que contar con un seguro que ofrezca coberturas claras y asistencia rápida puede ayudar a reducir esta ansiedad, permitiéndoles concentrarse en la carretera.
