Un encuentro familiar anual, conocido como la «Talegonada», ha reunido a unas 35 personas con el apellido Talegón desde el pasado viernes hasta este domingo en las localidades de Tagarabuena y Toro. La jornada central se celebra hoy, sábado, tras un emotivo inicio que comenzó con una misa en la iglesia de San Juan, donde los miembros de la familia se han reunido para rendir homenaje a sus raíces.
Después de la misa, los «Talegones» posaron para la tradicional foto de familia en la calle que lleva su apellido. Posteriormente, fueron recibidos en el Ayuntamiento por el primer teniente de alcalde, Carlos Rodríguez, quien les expresó su satisfacción por la continuidad de esta tradición: «Estamos contentos de que sigáis haciendo esto y haremos todo lo posible por ayudaros porque creemos que es una tradición bonita y consolidada ya en el tiempo».
Actividades y celebraciones
Durante la visita al Ayuntamiento, una de las «Talegonas» recitó dos poemas: el primero, titulado «¿Quién teme a la llanura?», fue un homenaje a la tierra que alberga sus raíces, mientras que el segundo estaba dirigido a todos los miembros de la familia. Posteriormente, el grupo se dividió en dos: algunos visitaron la bodega del Ayuntamiento, guiados por una de las técnicas de Turismo, mientras que otros disputaron un partido de fútbol sala.
La jornada culminó con una comida familiar en la que los «Talegones» pudieron compartir anécdotas y recordar viejos tiempos. Tras la comida, realizaron videollamadas a otros miembros de la familia que se encuentran repartidos por el mundo, manteniendo así el vínculo familiar a pesar de la distancia.
Un inicio festivo
La «Talegonada» comenzó el viernes por la noche con una cena que incluyó una tradicional queimada y una sesión de karaoke, marcando el inicio de un fin de semana lleno de actividades y celebraciones. El evento culminará mañana, domingo, con una jornada de paseos, vinos y compras por las calles de Toro, donde los familiares podrán disfrutar de la gastronomía y la cultura local.
Este encuentro no solo fortalece los lazos familiares, sino que también resalta la importancia de mantener vivas las tradiciones en un mundo cada vez más globalizado. La «Talegonada» es un ejemplo de cómo las raíces y la identidad familiar pueden ser celebradas con alegría y unión.