Este domingo se cumplen 28 años de la trágica muerte de Diana de Gales, una figura que transformó la monarquía británica y dejó un legado imborrable. Su impacto no solo se sintió a nivel institucional, sino que también marcó profundamente a sus hijos, los príncipes Guillermo y Harry, quienes han lidiado con la ausencia de su madre de maneras muy distintas.
La relación de Diana con Guillermo y Harry fue compleja, llena de momentos de cercanía y dolor. La princesa era conocida por su cariño y cercanía con ellos, mostrándose espontánea y divertida en público. Sin embargo, su trágica desaparición dejó a los príncipes en un estado de confusión y tristeza que ha perdurado a lo largo de los años. A pesar de su falta de contacto actual, ambos siguen adelante con el legado de su madre, participando activamente en la organización Diana Award, que reconoce a jóvenes por su labor humanitaria.
El legado de Diana y su impacto en sus hijos
Diana de Gales dedicó su vida a causas solidarias y, a día de hoy, su lucha sigue viva a través de sus hijos. Harry ha hecho de la concienciación sobre las minas antipersona una de las bases de su actividad benéfica, mientras que el bienestar emocional es un pilar en la labor de Guillermo y su esposa Kate Middleton. Este último ha mostrado gestos hacia su madre, como el uso de su anillo de compromiso y la elección del nombre Diana para su hija, Charlotte, en honor a ella.
El príncipe Harry, en su libro de memorias En la sombra, reflexiona sobre la crianza que recibió de su madre y cómo vivió su relación con ella. Antes del divorcio de sus padres en 1996, Harry experimentó momentos de desconcierto en la crianza. La protección y atención que recibía a veces contrastaban con su ausencia en otros momentos, lo que complicó su infancia. Además, tanto él como Guillermo fueron testigos de las tensiones entre sus padres, especialmente durante la famosa entrevista de Diana en 1995 con la BBC, donde ella confesó que había «tres personas en su matrimonio».
Recuerdos y el documental sobre Lady Di
La muerte de Diana marcó un antes y un después en la vida de sus hijos. Harry recuerda con claridad el último verano que pasó con ella en la Costa Azul, antes de que su vida se truncara en un accidente en París. La noticia de su fallecimiento llegó de manera abrupta, y la forma en que su padre le transmitió la trágica información dejó una huella en su vida emocional.
Harry está trabajando en un documental que se emitirá en 2027, coincidiendo con el 30 aniversario de la muerte de su madre. Este proyecto podría convertirse en un gran éxito para Netflix, que busca captar la atención del público, especialmente después de la resonante serie Harry & Meghan. A pesar de la distancia entre los hermanos, ambos continúan llevando adelante el legado de Diana, aunque de maneras diferentes y a través de sus propias luchas personales y profesionales.
La figura de Diana de Gales sigue presente en la memoria colectiva, y su influencia perdura en sus hijos, quienes enfrentan el reto de honrar su legado mientras navegan por sus propias vidas y responsabilidades.
