La tragedia provocada por la DANA que asoló parte de la Comunidad Valenciana ha sido objeto de críticas por parte del arquitecto Julio Gómez-Perreta, quien sostiene que la falta de previsión y ejecución de obras hidráulicas ha contribuido significativamente a los efectos devastadores de este fenómeno meteorológico. En una reciente entrevista en el programa El Cascabel de TRECE, el arquitecto, hijo del ingeniero que diseñó el desvío del cauce del Turia, señaló que la responsabilidad recae en el Ministerio de Transición Ecológica y en un concepto que califica de «falsamente verde».
Gómez-Perreta destacó que desde 2016 no se ha llevado a cabo ninguna de las 27 obras aprobadas y financiadas por la Unión Europea, que incluían proyectos cruciales como el desvío de los barrancos del Pollo y la Orteta hacia el nuevo cauce del Turia. “Había un montón de proyectos que se han explicado en el Senado y en las Cortes Valencianas, y no se hizo ninguno”, enfatizó, añadiendo que estas acciones estaban bloqueadas por la llamada Ley de la Huerta del Botànic, que impidió ejecutar el desvío del barranco del Pollo, donde se concentraron la mayoría de las víctimas.
Críticas a la respuesta del Gobierno
En su análisis, Gómez-Perreta no escatimó en críticas hacia la gestión del desastre. Afirmó que el día de la DANA fue un «caos» y que hubo fallos en la previsión meteorológica, la coordinación entre administraciones y en la respuesta del Ejecutivo central. “Falló Aemet, que dijo que la DANA se iba a Cuenca; falló la Confederación Hidrográfica del Júcar, que estaba centrada en Forata y no vio el problema del Pollo; falló la delegada del Gobierno… Fallaron todos”, lamentó el arquitecto.
Asimismo, Gómez-Perreta criticó la falta de intervención de las fuerzas armadas y la ausencia de una declaración de emergencia nacional que consideró necesaria en ese momento. “El Gobierno se puso de perfil, y mucha gente cree que fue una forma de colapsar políticamente a la Generalitat”, afirmó durante la entrevista.
Un legado familiar y un reconocimiento póstumo
El arquitecto también aprovechó la ocasión para recordar la figura de su padre, quien diseñó el Plan Sur y el nuevo cauce del Turia, obras que evitaron que la DANA causara estragos en la ciudad de Valencia. “El nuevo cauce fue fundamental, no solo como obra hidráulica, sino como una nueva visión urbanística de Valencia”, subrayó. En un gesto de reconocimiento, el Ayuntamiento de Valencia ha nombrado a su padre hijo adoptivo de la ciudad a título póstumo, algo que el arquitecto considera un gran orgullo para la familia.
