La Hermandad Provincial de Antiguos Caballeros Legionarios de Málaga ha anunciado con profundo pesar el fallecimiento de Salvador Rosado Peñafiel, un querido alferéz de la Legión en Ceuta. Su partida deja un vacío imborrable en todos aquellos que tuvieron el privilegio de compartir su camino, marcado por una vida de entrega y valores fundamentales.
Rosado Peñafiel, licenciado en Derecho y en Ciencias Económicas, no solo destacó por su sólida formación académica, sino también por su firme compromiso con los valores que caracterizan a la Legión: lealtad, honor, compañerismo y amor a España. Durante su etapa como alferéz en Ceuta, dejó huella en compañeros y mandos, siempre demostrando un espíritu legionario que lo acompañó toda su vida.
Un legado de compromiso y hermandad
Su pasión por la vida legionaria se mantuvo intacta, incluso después de abandonar el servicio activo. Como miembro de la Hermandad de Antiguos Caballeros Legionarios de Málaga, su presencia era constante en cada acto, donde su entusiasmo y entrega jamás faltaron. Además, su ferviente apoyo al Málaga Club de Fútbol reflejaba la misma intensidad con la que defendía los ideales legionarios.
La Hermandad ha querido rendirle homenaje con palabras de cariño: «Su vida fue un ejemplo de entrega, honor y lealtad, y su memoria quedará imborrable entre quienes tuvimos el privilegio de conocerle». En un mensaje compartido en redes sociales, sus hermanos evocaron su deseo de participar en el acto programado el pasado sábado en Ronda, una cita significativa para los legionarios. «El Cristo de Mena lo ha llamado a su lado, para que nos siga acompañando con su mirada desde arriba, vigilante y orgulloso, como solo un legionario sabe estar”, expresaron.
Conmemoración del 105 aniversario de la Legión
El fallecimiento de Salvador Rosado Peñafiel coincide con un momento simbólico para todos los legionarios: el 105 aniversario de la fundación de la Legión, que se conmemorará este fin de semana en Ceuta. La ciudad autónoma albergará actos solemnes como el arriado de bandera, un concierto militar y una parada castrense, destacando que el espíritu legionario continúa vivo tras más de un siglo de historia. Este aniversario también servirá para rendir homenaje a quienes, como Rosado Peñafiel, dedicaron parte de su vida a servir en sus filas.
Desde su creación en 1920 por Millán-Astray, la Legión se ha caracterizado por un credo que combina disciplina, hermandad y una profunda entrega a España. En este contexto, la figura de antiguos legionarios cobra un valor aún mayor, representando el hilo de continuidad que une a las generaciones actuales con aquellas que forjaron el prestigio del cuerpo.
La pérdida de Salvador Rosado Peñafiel supone la desaparición de un hombre cuya vida estuvo intrínsecamente ligada a la Legión, tanto durante su servicio activo como en su labor posterior dentro de la Hermandad de Málaga. Su ejemplo permanecerá como guía para quienes continúan defendiendo los ideales de esta fuerza militar, que mantiene intacta su identidad a lo largo del tiempo. La Hermandad se despidió con la palabra que todo legionario pronuncia al recordar a un hermano caído: «¡Presente!».