ELA ha solicitado a la Diputación de Gipuzkoa que parte del presupuesto de políticas sociales para 2026 no se destine únicamente a nuevas infraestructuras, sino que se enfoque en “mejorar realmente el modelo de cuidados” y eliminar la “precariedad” que sufren las trabajadoras del sector. Esta petición fue hecha en una rueda de prensa celebrada el miércoles en Donostia, donde se anunció la convocatoria de tres nuevas jornadas de huelga en residencias de ancianos y centros de día de Gipuzkoa para los días 19, 20 y 21 de noviembre, que se suman a las nueve ya realizadas desde el pasado junio.
Las delegadas de ELA, que representan el 60% de los trabajadores en estos centros, han decidido esta nueva ronda de paros tras una asamblea en la que manifestaron su descontento por la falta de avances en la negociación del convenio, que se encuentra “bloqueada desde abril”. Según las representantes, las patronales Adegi, Matia y Lares “no han planteado ninguna medida para afrontar la precariedad” laboral existente.
Demandas de las trabajadoras y reacción de la Diputación
Las trabajadoras Ana Merchán y Aintzane Orbegozo resaltaron que el cuidado de personas mayores y dependientes es “un servicio público competencia de la Diputación” y expresaron su preocupación por el proyecto de presupuestos presentado recientemente, que destina casi 600 millones de euros a políticas sociales, un 12% más que en 2025, con una asignación específica de 53 millones de euros para nuevas infraestructuras. Orbegozo criticó las declaraciones de la diputada general, Eider Mendoza, quien indicó que el incremento en este ámbito busca “impulsar la creación” de nuevas dotaciones sociales y “avanzar en la transformación de los cuidados”.
La representante de ELA argumentó que la propuesta de presupuestos prioriza las nuevas infraestructuras en lugar de abordar la verdadera transformación y mejora de los cuidados. “Los partidos del Gobierno foral, PNV y PSE-EE, tienen una oportunidad inmejorable para acordar unos presupuestos que consideren las reivindicaciones de las trabajadoras”, afirmó.
Condiciones laborales y brechas salariales
Orbegozo hizo hincapié en la necesidad de cambiar el modelo actual de cuidados, que depende de la subcontratación por parte de empresas privadas que “solo buscan aumentar beneficios a costa de la precariedad de sus empleadas”. También reclamó la implementación de contratos a jornada completa para todas las trabajadoras, dado que actualmente el 45% de las 5 000 empleadas del sector tienen contratos parciales. Además, subrayó la importancia de “acabar con la brecha salarial” existente entre operarias de centros de gestión pública directa y las subcontratadas, que perciben un 25% menos.
ELA concluyó que estas desigualdades son consecuencia de “la discriminación de género”, puesto que la subcontratación es más evidente en sectores con alta presencia femenina. Las movilizaciones continuarán mientras no se escuchen y atiendan sus demandas, reafirmando así su compromiso con la mejora de las condiciones laborales en el sector de cuidados en Gipuzkoa.
