En la localidad sevillana de Osuna, el Grupo de Desactivación de Explosivos (GEDEX) de la Guardia Civil ha desactivado dos granadas de mano de la Guerra Civil Española, las cuales fueron encontradas de manera fortuita durante la reforma de un inmueble. La intervención se llevó a cabo tras recibir una llamada de un particular que alertó sobre el hallazgo de un objeto que parecía un artefacto explosivo en el interior de su vivienda.
La alerta activó de inmediato al equipo especializado de la Comandancia de Sevilla, que se trasladó al lugar para evaluar la situación. Al llegar, los agentes confirmaron la presencia de dos granadas en un estado de conservación muy deficiente, lo que hacía que su manipulación fuese extremadamente peligrosa.
Procedimiento de desactivación
Ante el alto riesgo que presentaban los artefactos, el equipo de GEDEX procedió a trasladar las granadas a una zona segura, alejada de la población, donde se llevaron a cabo los trabajos de desactivación y destrucción utilizando medios propios de la especialidad. Afortunadamente, durante este procedimiento no se registraron daños materiales ni personales.
El Servicio de Desactivación de Explosivos de la Guardia Civil ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para seguir un protocolo estricto en caso de hallar objetos que puedan ser explosivos. Este protocolo se resume en cuatro pautas esenciales:
- No tocar ni mover ningún objeto sospechoso, ya que los explosivos antiguos pueden ser extremadamente inestables.
- Evitar la curiosidad o el exceso de confianza, manteniendo una distancia segura del artefacto.
- Señalizar el lugar del hallazgo, si es seguro hacerlo, para advertir a otras personas y a los especialistas que lleguen.
- Avisar de inmediato a la Guardia Civil a través del teléfono 062, activando así el protocolo de actuación establecido.
La rápida actuación de los agentes y el cumplimiento de las recomendaciones de seguridad son fundamentales para prevenir cualquier incidente en situaciones similares. La Guardia Civil continúa trabajando para garantizar la seguridad de la población ante la posible presencia de artefactos explosivos de épocas pasadas.