La violencia en el suroccidente de Colombia ha alcanzado un nuevo pico tras la explosión de un coche bomba en Cali, que dejó un saldo trágico de cinco muertos y 14 heridos. El ataque, ocurrido cerca de la Base Aérea Marco Fidel Suárez, ha sido confirmado por el presidente Gustavo Petro, quien aseguró que todas las víctimas son civiles.
En un evento sobre reforma agraria en el departamento del Cesar, Petro detalló que “hasta donde tengo información, no hay personal militar entre las víctimas”, lo que resalta la gravedad de la situación. La explosión se enmarca en una cadena de atentados que han golpeado la ciudad en los últimos meses, elevando la preocupación sobre la seguridad en la región.
Escalada de violencia en Cali
La magnitud del ataque ha puesto de relieve la vulnerabilidad de Cali frente a la ofensiva de grupos armados que operan en la zona. En las últimas semanas, la capital del Valle del Cauca ha sido testigo de varios incidentes violentos. Por ejemplo, el pasado 10 de junio de 2023, explosivos en barrios como Meléndez, Manuela Beltrán y Los Mangos causaron al menos una víctima mortal y decenas de heridos.
Estos ataques, atribuidos a disidencias de las FARC, confirman una escalada de violencia en la región que ha incorporado el uso de coches bomba, drones y motobombas. La situación actual ha forzado al Gobierno a activar medidas urgentes de protección y a convocar un consejo extraordinario de seguridad en la ciudad.
Respuesta gubernamental y seguridad ciudadana
El presidente Gustavo Petro anunció que se desplegarán fuerzas adicionales y que se coordinarán esfuerzos con las autoridades locales para evitar nuevos atentados. La presión sobre el Gobierno colombiano para garantizar la seguridad ciudadana en el Valle del Cauca se intensifica, dado el impacto que estos actos violentos tienen en la población.
Las investigaciones están en marcha para determinar los responsables del ataque y evaluar su capacidad operativa. La prioridad inmediata es brindar atención a los heridos y proteger a la población civil, mientras se busca restablecer la seguridad en una ciudad que ha sufrido en las últimas semanas por una creciente ola de violencia.