La campaña electoral en Andalucía se ve sacudida por las recientes declaraciones de miembros del Partido Popular (PP), que han arremetido contra las mujeres afectadas por el cribado de cáncer de mama. En un giro inesperado, el presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno Bonilla, y su consejero de Salud, Antonio Sanz, han responsabilizado a las víctimas de generar una «alarma social bestial», lo que ha provocado un fuerte rechazo en la sociedad.
Un vídeo polémico y las acusaciones de manipulación
La situación se ha intensificado con la difusión de un vídeo por parte del PP que intenta vincular a la Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama (Amama) con el PSOE. A pesar de las insinuaciones, la presidenta de Amama, Ángela Claverol, ha desmentido tales afirmaciones, afirmando que existen fotografías que la muestran junto a miembros del PP en contextos similares. En el mencionado vídeo, se instaba a la población a no caer en «la trampa» del uso político del sufrimiento de las pacientes.
Claverol, en declaraciones a Mañaneros 360, ha criticado la estrategia del PP, señalando que la manipulación de las imágenes es evidente y que la asociación no tiene inclinaciones políticas. «El que quiera que mire las fotos de Amama, hay fotos con cualquier partido que nos ha ayudado», argumentó Claverol, defendiendo la imparcialidad de la organización.
Reacciones y la realidad de las afectadas
La controversia se ha avivado tras las acusaciones del Gobierno andaluz, que ha calificado las declaraciones de las afectadas como «calumnias e injurias». Moreno Bonilla, durante una comparecencia, lamentó que Amama haya decidido no colaborar con el Ejecutivo, sugiriendo que las mujeres prefieren manifestarse en lugar de dialogar. Sin embargo, Claverol ha respondido a estas afirmaciones, recordando que la falta de comunicación no es culpa de su organización, sino de la falta de planificación del Gobierno.
Las palabras de la presidenta de Amama subrayan la difícil situación que enfrentan. «Nunca he dicho que no me quiera juntar. He dicho que no puedo ir el viernes debido a esta inmediatez que ellos tienen», explicó, resaltando que las pacientes también tienen sus propias obligaciones y desafíos que afrontar.
Este conflicto no solo pone de manifiesto la tensión política en Andalucía, sino que también pone en riesgo la atención y el apoyo que estas mujeres necesitan en un momento de vulnerabilidad. Las acusaciones y la manipulación política pueden desviar la atención de lo que realmente importa: la lucha contra el cáncer y el apoyo a las víctimas.
La controversia continúa, y las próximas semanas serán decisivas para observar cómo se desarrollan estos acontecimientos en el contexto de la campaña electoral.
