El verano de 2023 está dejando huella en el calendario meteorológico de España, con una ola de calor que comenzó el pasado 3 de agosto y se prevé que se prolongue durante varios días. Según datos de Meteored, esta segunda ola podría ser una de las más largas registradas, con temperaturas que alcanzan máximos históricos en diversas localidades.
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido alertas en varias regiones. En Badajoz se han registrado temperaturas de 43,4 ºC, mientras que otros observatorios en Córdoba, Ciudad Real, Sevilla y Jaén han superado los 42 ºC. Este fenómeno no solo es notable por sus altas temperaturas, sino también por su duración, que podría extenderse hasta casi mediados de agosto.
Persistencia del calor extremo
Los modelos climáticos indican que el calor extremo se mantendrá hasta la próxima semana, lo que plantea un escenario preocupante. Las temperaturas en ciudades como Badajoz, Córdoba y Sevilla podrían superar de nuevo los 43 ºC. Además, el calor también afectará a otras localidades del interior, donde se prevén máximas de 40 ºC o más. En el norte, tradicionalmente más fresco, se podrían alcanzar los 35 ºC en lugares como Bilbao.
Uno de los aspectos más preocupantes de esta ola de calor es la escasez de alivio nocturno, ya que las mínimas podrían no bajar de los 25 ºC en muchas zonas del interior y sur de la península, así como en las Islas Baleares y Canarias. Este fenómeno, conocido como «noches tropicales», podría extenderse incluso a áreas donde no es habitual, como la meseta norte.
Factores que complican la situación
A pesar de la inminente ola de calor, existen ciertos factores que podrían suavizar las temperaturas durante las horas más cálidas. La llegada de polvo en suspensión desde el sur, así como la posible aparición de nubosidad media y algunas tormentas, podrían ofrecer un respiro temporal. Sin embargo, estas tormentas también conllevan riesgos adicionales, como la actividad eléctrica que, combinada con la extrema sequedad del terreno, aumenta la probabilidad de incendios.
Meteored ha subrayado la importancia de seguir de cerca la evolución de estos fenómenos meteorológicos en los días venideros. La combinación de temperaturas extremas y su persistencia dibuja un panorama complejo que requiere de atención y precauciones tanto de día como de noche.
Las autoridades han hecho un llamado a la población para que preste especial atención a los avisos oficiales y extremen las precauciones ante lo que se perfila como una de las pruebas más duras del verano. La situación meteorológica actual no solo representa un desafío para el confort diario, sino que también plantea serias preocupaciones sobre la salud y la seguridad de la población.