Este domingo, miles de ciudadanos se han congregado en Madrid para celebrar el acto central del 12 de octubre, la Fiesta Nacional, rindiendo homenaje a las Fuerzas Armadas. El evento, presidido por los reyes, ha transcurrido sin incidentes, aunque las condiciones meteorológicas, con cielos nublados, han obligado a reducir el despliegue aéreo a los aviones de combate y a la nueva Formacion Mirlo.
Un total de 3 847 militares, de los cuales 524 eran mujeres, han marchado durante una hora y media a lo largo de los 1 540 metros del recorrido, desde la Glorieta de Carlos V hasta la Plaza de Colón. Este año se ha conmemorado el veinte aniversario de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que ha participado con un número mayor de efectivos en comparación con otros años. La emblemática Patrulla Águila no ha formado parte del desfile, siendo sustituida por la Formacion Mirlo, que ha realizado su debut.
El desfile y la llegada de los reyes
Poco antes de las 11:00 horas, los reyes han llegado a la tribuna real, situada en la Plaza de Canovas del Castillo, donde han saludado a diversas autoridades, incluido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la ministra de Defensa, Margarita Robles, y el jefe de Estado Mayor de la Defensa, Teodoro López Calderón. También han sido parte del saludo la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida.
La familia real ha estado acompañada por la princesa Leonor, quien ha lucido el uniforme de gala como alférez alumna del Ejército del Aire y del Espacio, y la infanta Sofía, que ha asistido este año después de dos ediciones en las que no pudo acudir debido a sus estudios en Gales.
El desfile ha comenzado con el salto de la Patrulla Acrobática de Paracaidismo del Ejército del Aire y del Espacio, donde el sargento primero Óscar Marsal ha portado la bandera de España en una maniobra precisa. Sin embargo, debido a las condiciones climáticas, la toma de tierra se ha realizado en una zona secundaria, alejada de la tribuna real.
Un evento significativo a pesar de los cambios
El izado de la bandera ha sido seguido por un homenaje a aquellos que dieron su vida por España, donde el rey y la princesa de Asturias han depositado una corona. La Formacion Mirlo ha surcado los cielos de Madrid, pintando por primera vez los colores de la enseña nacional, en un acto que marca el relevo de los aviones C-101 de la Patrulla Águila, que se despidieron tras 40 años de servicio.
Este año, los ciudadanos solo han podido observar el paso de los cazas, como el Eurofighter y el F-18, ya que el mal tiempo ha impedido el sobrevuelo de otros aviones y helicópteros programados. Tras el desfile aéreo, ha comenzado el desfile terrestre, que ha incluido 123 vehículos y 39 motos, liderados por la sección de motos de la Guardia Real y acompañado por unidades del Ejército de Tierra, Armada y Ejército del Aire.
La UME ha sido una de las unidades más aplaudidas, participando con dos compañías en lugar de una, y el tercio «Gran Capitán» 1º de la Legión ha desfilado con su mascota, un borrego llamado ‘Baraka’, que simboliza buena suerte. Al finalizar el acto, los reyes y la familia real se han trasladado al Palacio Real para una recepción con altas autoridades del Estado y representantes de diversos sectores.