El comienzo del nuevo curso escolar, que arrancará el lunes 8 de septiembre de 2025 en la mayoría de las comunidades autónomas, traerá consigo un notable cambio en el enfoque educativo. Más del 75% de los profesores españoles han afirmado que incorporarán herramientas de Inteligencia Artificial (IA) en su metodología, según una encuesta realizada por Kahoot! a más de 1 100 docentes en agosto de este año. Esta tendencia refleja un avance significativo hacia la modernización del sistema educativo.
Los educadores planean utilizar la IA principalmente para la preparación de contenido educativo (37%), el aprendizaje virtual (18%) y la gamificación de los planes de estudio (17%). Estos datos revelan un creciente interés por parte de los docentes en integrar tecnologías que fomenten un entorno de aprendizaje más dinámico y atractivo. Entre los beneficios más destacados de la IA, se encuentran el aumento del interés y motivación en los alumnos (30%), una mejor adquisición del conocimiento (15%) y una comunicación más efectiva con los estudiantes (14%).
El papel de las TIC y la importancia de limitar el uso de móviles
Las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) continúan siendo fundamentales en el ámbito educativo, ya que el 79% de los docentes ha utilizado o planea utilizar estas herramientas en sus clases. Las presentaciones en clase se mantienen como la opción más empleada, con un 21%, seguidas del uso del aula virtual (19%) y las plataformas de gamificación (14%). Sin embargo, a pesar de esta integración tecnológica, los educadores son conscientes de la necesidad de regular el uso de dispositivos móviles en el aula; el 59% de ellos opina que la prohibición de móviles personales ha facilitado un mayor interés en las clases.
La plataforma Canva ha señalado cinco tendencias clave que marcarán el próximo curso: la alfabetización visual y digital, el aprendizaje interactivo y gamificado, el aprendizaje personalizado impulsado por IA, la centralización de recursos educativos y el uso de datos visuales para evaluar el progreso del alumnado. Estos enfoques no solo enriquecen la enseñanza, sino que también posicionan a la IA como un aliado estratégico para los docentes, que seguirán siendo el motor del proceso pedagógico.
La IA como asignatura obligatoria en el ámbito profesional
En un contexto donde la evolución tecnológica avanza rápidamente, Juan Luis Moreno, partner y managing director de The Valley, destaca que la IA se ha convertido en una herramienta esencial para los profesionales. En su opinión, «la rápida evolución tecnológica ha convertido septiembre en un punto crítico para retomar la actividad profesional con seguridad y claridad de propósito». La formación continua en IA se vuelve crucial para preparar a los profesionales ante los desafíos del mercado actual, permitiendo así anticipar tendencias y automatizar tareas estratégicas.
Los expertos han identificado seis razones por las que la IA es considerada una «asignatura obligatoria» este curso. Entre ellas se menciona que la IA ahora es transversal en todos los sectores y ha dejado de ser una herramienta opcional. Comprender su funcionamiento y aplicaciones se ha vuelto necesario para todos los perfiles profesionales, no solo para los técnicos. Los líderes que entienden la IA pueden guiar a sus equipos en la adopción tecnológica y marcar el rumbo hacia la innovación.
Además, la capacidad de analizar datos en tiempo real permite a las organizaciones anticipar tendencias y minimizar riesgos de manera más eficaz. Al delegar tareas repetitivas a la IA, se liberan recursos y talento para enfocarse en la creación de experiencias diferenciales y el desarrollo del negocio. La integración de la IA con big data, IoT y soluciones en la nube multiplica su potencial, convirtiéndose en un aliado estratégico en tiempos de crisis.
Un informe de Microsoft Research concluye que los puestos que requieren habilidades de análisis, presentación y enseñanza son los más expuestos al impacto de la IA. Sin embargo, desde The Valley se enfatiza que este cambio no debe verse solo como un riesgo, sino como una oportunidad para reinventarse. Los líderes que comprendan el potencial de la IA podrán liberar tiempo para tareas de mayor valor y desempeñar un papel clave en la transformación de sus organizaciones.
