Más de la mitad de los jóvenes de entre 25 y 35 años en la Ciudad de México no tienen acceso a una vivienda asequible, según un reciente informe del gobierno capitalino. La gobernante, Brugada, destacó que el precio de las casas ha duplicado en la última década, mientras que las familias más pobres destinan más del 50% de sus ingresos al pago de rentas. Cada año, cerca de 53 000 familias buscan alquilar una vivienda, pero sus ingresos apenas superan los 10 000 pesos mensuales (aproximadamente 542 dólares), lo que resulta insuficiente ante una oferta cada vez más cara.
De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Salud Financiera (Ensafi) elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), los habitantes de la capital necesitan aproximadamente 29 500 pesos (alrededor de 1 627 dólares) mensuales para cubrir sus gastos básicos. Este dato es alarmante, ya que el promedio nacional para vivir en el país se sitúa en 16 421 pesos (unos 905,69 dólares).
Iniciativas para facilitar el acceso a la vivienda
En este contexto, Brugada anunció que se entregará próximamente la primera tanda de departamentos del programa Vivienda Pública en Renta, diseñado para jóvenes que no pueden permitirse comprar una casa. Este plan, que ya ha comenzado con la construcción de un conjunto habitacional en el Centro Histórico, tiene como objetivo beneficiar a los sectores más vulnerables, sin establecer un límite de edad para la juventud.
El diario La Jornada informa que esta estrategia está dirigida a personas cuyos ingresos no superen los tres salarios mínimos, equivalentes a 25 000 pesos (aproximadamente 1 255 dólares), y el costo de la renta no debe superar el 30% de sus ingresos. Para el año 2025, se destinarán 600 millones de pesos (alrededor de 32,52 millones de dólares) para construir 1 000 departamentos en las alcaldías de Cuauhtémoc, Azcapotzalco y Miguel Hidalgo.
Propuestas legislativas para regular el alquiler
Brugada también adelantó que presentará una propuesta de ley al Congreso de la Ciudad de México para garantizar rentas justas, razonables y asequibles, además de crear una defensoría inquilinaria. «Es necesario acabar con los abusos en materia de vivienda», afirmó Brugada, subrayando que «los precios de las rentas no pueden subir por encima de la inflación».
Esta problemática de la vivienda en la Ciudad de México se agrava por el fenómeno de la gentrificación, que ha llevado a muchos ciudadanos a protestar por el aumento desmedido de los precios. La situación refleja una crisis habitacional que requiere atención urgente y soluciones efectivas.
