El I Congreso Internacional de Profesionalización del Carnaval, celebrado en Tenerife, ha puesto de manifiesto la necesidad de superar lo que se ha denominado el “síndrome del entierro de la Sardina”. En la clausura del evento, el consejero insular de Empleo del Cabildo de Tenerife, Efraín Medina, instó a emprender y afrontar la siguiente edición del Carnaval con profesionalización y formación. Este congreso ha reunido durante dos días a expertos y representantes de diversas ciudades del mundo, quienes han compartido sus experiencias y modelos de gestión del Carnaval.
Paises como Uruguay, Brasil, Colombia, Alemania y Cabo Verde, así como ciudades españolas como Cádiz, Las Palmas de Gran Canaria y Murcia, han estado representados en el congreso. El maestro de ceremonias, Alexis Hernández, resumió la esencia del evento al afirmar que “el Carnaval no es un museo, sino un camino”, destacando la importancia de la evolución continua en esta celebración cultural.
La profesionalización del Carnaval canario
En el congreso, Josué Quevedo, director artístico del Carnaval de Las Palmas, puso de relieve la profesionalización de diseñadores tinerfeños como Santi Castro, Juan Carlos Armas y Daniel Pagés, quienes han logrado extender su influencia más allá de las fantasías carnavalescas hacia campos como la moda y la escenografía. Quevedo, quien ha alcanzado un notable éxito en su carrera, se ha rodeado de un equipo de 72 profesionales, lo que refleja el crecimiento y la importancia del Carnaval en el ámbito laboral.
Modelos de Carnaval en el mundo
El gerente de Festejos y Espectáculos de la Intendencia de Montevideo, Eduardo Rabelino, comentó que el Carnaval uruguayo es considerado “el más largo del mundo”, con una duración que puede superar los 40 días. Este evento incluye a 40 grupos en cinco categorías, como murgas y comparsas de candombe, y atrae a miles de turistas, generando un impacto económico significativo. Se estima que el Carnaval mueve alrededor de seis millones de dólares en inversión directa cada año.
Por su parte, el representante del Carnaval de Barranquilla, Alberto Gómez, explicó que su evento se gestiona bajo un modelo mixto, con la participación del Ayuntamiento y socios privados, lo que ha permitido reunir 811 propuestas artísticas que generan una derrama económica de 800.000 millones de pesos colombianos. En la ciudad de Río de Janeiro, el Carnaval cuenta con 12 escuelas de samba y una inversión pública estimada de 200 millones de reales, lo que genera un impacto económico total de dos billones de reales.
Desde España, Pablo Rizpalacios, presidente de la Agrupación Sardinera de Murcia, destacó que las Fiestas de Primavera movilizan a 2.000 personas y generan un retorno económico estimado de 20 millones de euros. En Águilas, el presidente del Carnaval, David Caparrós, subrayó que su fiesta atrae hasta 200.000 personas al día, con un presupuesto que oscila entre 600.000 y 700.000 euros, lo que demuestra el potencial económico de estas celebraciones.
El I Congreso Internacional de Profesionalización del Carnaval ha abierto un camino hacia la modernización y sostenibilidad de estas festividades, destacando la importancia de la formación y la profesionalización para garantizar su futuro.