La Audiencia de Girona ha absuelto al acusado que se enfrentaba a una pena de 10 años de cárcel por la supuesta violación de una joven durante una fiesta en una casa de Lloret de Mar, la madrugada del 14 de junio de 2021. Según la sentencia de la sección tercera, el tribunal concluyó que no se había acreditado que la víctima no diera su consentimiento a las relaciones sexuales.
La resolución, redactada por el magistrado Walter Ballarín, destaca la existencia de «versiones contradictorias de los hechos». Se señala que el relato de la víctima, presentado en el juicio, presentaba variaciones, omisiones o complementos en comparación con declaraciones anteriores, lo que ha influido en la valoración de su testimonio como prueba válida.
Detalles del Caso
La Fiscalía había acusado al procesado de un delito de agresión sexual y de un delito leve de lesiones, pidiendo una pena de 8 años de prisión y una multa de 900 euros. Por su parte, la acusación particular, representando a la víctima, solicitó hasta 10 años de cárcel y una multa de 1 800 euros. La defensa, liderada por el abogado Javier Pascual Franquesa, argumentó que las relaciones sexuales fueron «plenamente consentidas».
Durante el juicio, la víctima relató que asistió a la fiesta junto a unas amigas, llegando al lugar sobre las 21:00 horas del 13 de junio. A lo largo de la noche, la joven y el acusado interactuaron de manera cercana, llegando incluso a besarse en varias ocasiones, aunque ella afirmó que lo hacía en respuesta a la insistencia de él y que no quería que la situación avanzara debido a que tenía pareja.
La Decisión del Tribunal
La sentencia establece que, a las 02:00 horas del 14 de junio, ambos se retiraron juntos a una habitación, donde ocurrieron al menos dos momentos de penetración. Mientras que la víctima insistió en que todas las relaciones fueron sin consentimiento, el acusado alegó que cuando ella expresó su deseo de detenerse, él lo hizo, aunque después continuaron debido a que volvieron a besarse.
El tribunal subraya que la declaración de la víctima presentaba inconsistencias que afectan su credibilidad. Se concluye que no hay pruebas que corroboren su relato ni otros testimonios de los participantes en la fiesta que respalden la acusación de agresión sexual.
La Audiencia de Girona resalta que la falta de elementos periféricos que puedan desvirtuar la presunción de inocencia del acusado llevó a la decisión de absolución. Esta resolución no es firme y puede ser recurrida ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.