El Ayuntamiento de Valencia ha aprobado la adjudicación de 13 viviendas municipales en régimen de alquiler asequible a familias que se encuentran en situación de vulnerabilidad. Este acuerdo fue anunciado por el edil portavoz del ejecutivo municipal, Juan Carlos Caballero, durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno Local, donde destacó la importancia de atender las necesidades habitacionales de estas familias.
Las viviendas son parte del Programa de Acceso a la Vivienda Municipal, aprobado en enero de 2013 y actualizado en junio de este año. Este programa cuenta con un equipo profesional interdisciplinar cuyo objetivo es normalizar la situación de las familias beneficiarias, teniendo como eje central la vivienda. “Son familias altamente vulnerables que requieren de apoyo”, afirmó Caballero, destacando que la mayoría de estas unidades familiares tienen menores a su cargo.
Distribución y características de las viviendas
Las 13 viviendas adjudicadas se distribuyen en varios distritos de la ciudad, incluyendo Campanar, Ciutat Vella, Poblats Marítims y l’Olivereta, así como una en el municipio vecino de Xirivella. En Campanar, se han asignado dos viviendas a familias monoparentales, una de las cuales incluye a una madre con cinco hijos, afectada por un proceso de desahucio.
En Ciutat Vella, se adjudicaron seis viviendas a diferentes unidades familiares, incluyendo casos de violencia de género y personas con dependencia. En Poblats Marítims, tres familias también recibirán viviendas, destacando una familia monoparental con un menor y un adulto en situación de dependencia. Finalmente, en l’Olivereta, se entregará una vivienda a un ciudadano de 67 años con una pensión no contributiva reducida a 330 euros.
Compromiso con la inclusión social
El edil subrayó que esta medida representa “un pasito más” en el compromiso del consistorio por atender a las personas más vulnerables, especialmente en relación con el acceso a la vivienda. “Sabemos que la vivienda es uno de los principales problemas de los ciudadanos. Es un reto muy importante garantizar que las familias no sean expulsadas de la ciudad”, enfatizó Caballero.
El Ayuntamiento de Valencia ha implementado un sistema de baremo que evalúa las circunstancias socio-familiares y económicas de cada solicitante, tomando en cuenta indicadores como el número de menores a cargo y situaciones de monoparentalidad, discapacidad, violencia de género, entre otros. Este enfoque busca priorizar a aquellos que se encuentran en mayor riesgo y facilitar su acceso a una vivienda digna.
Con estas acciones, el consistorio reafirma su sensibilidad hacia las necesidades de las familias en situación de emergencia habitacional y vulnerabilidad, promoviendo políticas de inclusión que buscan mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos.