Merck ha revelado su nueva estrategia durante la presentación de resultados del segundo trimestre de 2025, donde planea implementar una «iniciativa de optimización plurianual» que generará 3.000 millones de dólares en ahorros anuales para finales de 2027. Esta reestructuración tiene como objetivo redirigir recursos hacia el desarrollo de nuevos productos y apoyar su cartera de medicamentos.
En palabras de Robert M. Davis, presidente y consejero delegado de Merck, «Hoy anunciamos una iniciativa de optimización plurianual que redirigirá la inversión y los recursos de áreas más maduras de nuestro negocio a nuestra creciente gama de nuevos impulsores de crecimiento». La compañía espera que esta reestructuración resulte en ahorros anuales de aproximadamente 1.700 millones de dólares, que se materializarán sustancialmente para finales de 2027.
Resultados del segundo trimestre
Los resultados financieros de Merck entre abril y junio han mostrado cifras preocupantes. El beneficio neto ha caído un 18,85% interanual, situándose en 4.430 millones de dólares, mientras que los ingresos han descendido un 2%, alcanzando los 15.810 millones de dólares. En cuanto a las divisiones, la farmacéutica ha registrado ingresos de 14.050 millones de dólares en su división de medicamentos, un descenso del 2%.
Las ventas de Keytruda, uno de sus productos estrella, han experimentado un crecimiento del 9% interanual, alcanzando los 8.000 millones de dólares, pero la facturación de Gardasil ha sufrido un fuerte descenso del 55%, quedando en 1.100 millones de dólares.
Revisiones de previsiones
De cara al futuro, Merck ha revisado a la baja sus previsiones para 2025, esperando un BPA ajustado entre 8,87 y 8,97 dólares, una reducción respecto al rango anterior de 8,82 a 8,97 dólares. En cuanto a los ingresos, la compañía anticipa que se sitúen entre 64.300 millones y 65.300 millones de dólares, un ligero ajuste desde su estimación previa de 64.100 millones a 65.600 millones de dólares.
La nueva estrategia de Merck refleja un enfoque proactivo para hacer frente a los desafíos del mercado y garantizar el crecimiento a largo plazo de la compañía, priorizando la innovación en su cartera de productos.
