Junts ha dado un paso significativo al alinearse con el Partido Popular (PP) y Vox para exigir al Gobierno una revisión «a la baja» de los impuestos que gravan a las familias y autónomos. En un mensaje claro, Miriam Nogueras, portavoz de Junts, ha señalado que «es la hora del cambio», lo que ha resonado como una advertencia para el Ejecutivo.
Este apoyo a la iniciativa del PP busca ajustar el IRPF a la inflación, con el objetivo de «compensar la pérdida de poder adquisitivo» de los ciudadanos. Además, Junts propone que el salario mínimo quede exento de tributación durante el año 2026 y que no se incrementen las cuotas que deben abonar los autónomos.
La postura de Junts se presenta en un contexto donde la presión sobre el Gobierno para aliviar la carga fiscal se intensifica. La colaboración con PP y Vox marca una estrategia conjunta que puede influir en la agenda política y económica del país. En este sentido, la formación independentista busca posicionarse como un actor relevante en la discusión sobre la política fiscal, alineándose con fuerzas de la derecha para hacer frente a lo que consideran un agravio a los contribuyentes.
La propuesta ha sido bien recibida por sectores que abogan por una reducción de impuestos, aunque también ha generado críticas de aquellos que argumentan que tales medidas podrían afectar negativamente a la recaudación y, en última instancia, a los servicios públicos. La tensión entre la necesidad de ajustar los impuestos y mantener un sistema de bienestar robusto se torna cada vez más palpable en el debate político.
Con esta iniciativa, Junts no solo busca impactar en la política fiscal, sino también recuperar el terreno perdido en el ámbito de la influencia política en el contexto actual. El futuro de esta propuesta dependerá de la capacidad de los partidos para unir fuerzas y de la respuesta que el Gobierno esté dispuesto a dar.
La situación continuará desarrollándose y, sin duda, marcará la pauta en los próximos meses, en un clima en el que las decisiones fiscales son más cruciales que nunca para el bienestar de los ciudadanos.