El reconocido economista Henrik Zeberg ha lanzado una advertencia contundente sobre el estado de la economía estadounidense al prever una recesión que podría ser más severa que la crisis de 2008. En un análisis publicado el 28 de noviembre de 2023 en su plataforma de Substack, Zeberg destaca que la ilusión de fortaleza económica está a punto de desmoronarse, ya que diversos indicadores económicos apuntan hacia un colapso inminente.
Entre los datos alarmantes que señala, se encuentra la pérdida de fuerza en el crecimiento de las nóminas no agrícolas, así como la caída en la producción industrial y las ventas minoristas. Además, menciona que los reportes anteriores han exagerado las ganancias laborales, lo que contribuye a un panorama económico sombrío. El consumidor estadounidense, que representa cerca del 70% del PIB, está mostrando señales preocupantes de debilidad.
Impacto en los hogares y la confianza del consumidor
La situación de los hogares es crítica, ya que han agotado los ahorros acumulados durante la pandemia y enfrentan la inflación más alta en cuatro décadas. Actualmente, cargan con más de 1 billón de dólares en deuda de tarjetas de crédito, donde las tasas de interés superan el 20%. Este incremento en la morosidad de préstamos para automóviles y tarjetas de crédito, junto con un aumento en las solicitudes de quiebra, refleja la presión financiera que enfrentan las familias.
La confianza del consumidor ha colapsado, alcanzando niveles que recuerdan los peores momentos de la crisis de 2008-09. Este descenso ha llevado a caídas significativas en las ventas de automóviles, renovaciones de viviendas y compras discrecionales, lo que exacerba la situación económica. Aunque el mercado laboral parecía resistente hasta hace poco, Zeberg ha observado que las vacantes han disminuido, y las empresas están recortando sus planes de contratación, lo que ya ha resultado en despidos y congelaciones de puestos en sectores como el tecnológico, inmobiliario y minorista.
Perspectivas de una depresión deflacionaria
El economista ha alertado sobre la posibilidad de que Estados Unidos se dirija hacia una depresión deflacionaria, seguida de un reinicio estagflacionario. Esta evolución no solo marcaría el fin de un ciclo económico, sino que podría indicar el final de la era monetaria actual. Zeberg ha sido claro en su advertencia, sugiriendo que antes del colapso de activos como acciones, los inversionistas deben esperar un período de euforia que podría llevar a máximos históricos antes de la caída masiva.
En este contexto, la atención se centra en cómo se desarrollará la economía en los próximos meses, ya que los signos de una recesión se multiplican y los hogares enfrentan una creciente carga de deuda. La situación exige un análisis profundo y medidas efectivas para mitigar el impacto en la población y el tejido económico del país.
