El gobierno local de Vigo ha aprobado definitivamente el proyecto de las Zonas de Bajas Emisiones tras considerar algunas alegaciones presentadas durante el proceso de exposición pública. Esta medida, que comenzará a implementarse el próximo año, limitará el acceso a vehículos sin etiqueta ambiental, con restricciones progresivas a partir de 2028 para coches con etiqueta B y, finalmente, desde 2031 para aquellos con etiqueta C. Los vehículos etiquetados como Eco y Cero tendrán acceso libre.
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El alcalde de Vigo, Abel Caballero, subrayó que se han aceptado alegaciones concernientes a los horarios de carga y descarga, que deberán ajustarse a la ordenanza municipal correspondiente. Además, se ha reconocido el acceso a los prestadores de servicios que operan en estas zonas, garantizando la continuidad de sus actividades.
Próximos pasos y excepciones en la normativa
El siguiente paso tras esta aprobación será la elaboración de una ordenanza específica que incluirá excepciones como el acceso para residentes, personas con movilidad reducida, así como para aquellos que utilicen aparcamientos subterráneos y otras circunstancias particulares. Caballero insistió en que la actividad económica y la circulación de vehículos no deberían verse gravemente afectadas, asegurando que “nadie tendrá que cambiar de vehículo para acceder a las Zonas de Bajas Emisiones”.
Este proyecto forma parte de un esfuerzo más amplio por parte del Ayuntamiento de Vigo para mejorar la calidad del aire y fomentar un transporte más sostenible. La implementación de las Zonas de Bajas Emisiones es una respuesta directa a las preocupaciones sobre la contaminación urbana y su impacto en la salud pública.
La aprobación de estas medidas ha generado un debate en la ciudad sobre sus implicaciones para los ciudadanos y el comercio local, especialmente en un contexto donde la movilidad sostenible se vuelve cada vez más relevante. La atención se centrará ahora en cómo se llevará a cabo la transición y la adaptación de la población a estas nuevas regulaciones.
