En un gesto conmovedor por la paz, una familia holandesa residente en Navia de Suarna ha recorrido a pie el trayecto hasta Piornedo para plantar banderas de paz. Este acto, realizado el pasado domingo, busca concienciar sobre la situación de violencia que afecta a los niños y niñas de Gaza.
La familia, compuesta por Haron, Nienke y sus cinco hijos, ha adoptado el nombre de colectivo artístico ‘We are a lot’, y se inspiró en la icónica canción de John Lennon, «Give Peace a Chance». Su mensaje, urgido por la necesidad de paz en el mundo, resuena en las banderas que han colocado, en un esfuerzo por llevar su voz a todos los rincones de la tierra.
Mensaje de esperanza y acción solidaria
La caminata comenzó desde A Proba, donde habían colocado un poste desde principios de agosto. Durante su trayecto, la familia recogió mensajes de paz de otros vecinos, los cuales fueron grabados y emitidos junto a la música de Lennon en varios puntos de la localidad. En Piornedo, los derechos humanos universales fueron leídos por niños, añadiendo una dimensión educativa y solidaria a la iniciativa.
La familia también ha puesto en marcha una campaña de recaudación de fondos para Save the Children, destinada a los niños que sufren la crisis en Gaza. Para ello, han colocado huchas en bares y comercios de Navia, así como la opción de contribuir en línea a través de la página de la ONG.
Un futuro de paz en el horizonte
El proyecto, titulado ‘Llamamos a la paz desde Os Ancares’, no termina aquí. La familia planea organizar un evento el 21 de septiembre, coincidiendo con el Día Internacional de la Paz, donde se presentará un vídeo que recopila la memoria de su proyecto y la participación de la comunidad. «En un mundo caracterizado por la inseguridad y la incertidumbre, queremos que todos puedan alzar su voz por la paz», afirmaron los miembros del colectivo.
El año pasado, la misma familia realizó una acción similar, creando linternas con mensajes que fueron depositadas en el río Navia. Este año, han decidido juntar sus palabras nuevamente, para que el viento las esparza por el mundo desde las montañas de Os Ancares.
Con su peregrinación y sus esfuerzos por concienciar sobre la violencia en el mundo, esta familia holandesa nos recuerda la importancia de actuar y alzar la voz en favor de la paz, no solo como individuos, sino como comunidad.
