El Tour de Francia entra hoy en su tercera y última semana, marcada por un segundo día de descanso antes de la intensa batalla final. Esta semana se concentrará en tres finales en alto: Mont Ventoux el martes, La Loze el jueves y La Plagne el viernes, todos ellos puertos de categoría especial. Especialmente exigente será la etapa del jueves, ya que los ciclistas tendrán que ascender también el Glandon y La Madeleine, también de categoría especial. A pesar de los desafíos, la superioridad que ha demostrado Tadej Pogacar invita a pensar que el Tour está en sus piernas, tanto para ganarlo como para perderlo, lo que solo ocurriría en caso de una caída inesperada.
La confianza del esloveno y su equipo, el UAE, es notable, permitiendo incluso el lucimiento de Tim Wellens en la 15ª etapa del Tour. “Hay vida después de Pogacar. Tenemos un plan claro para apoyar a nuestro líder, pero ver ganar a Tim es una alegría inmensa. Tenemos al mejor corredor y eso nos da más opciones”, declaró Josean Fernández Matxin, director del equipo. En este momento, Pogacar lidera con una ventaja de 4’13» sobre el danés Jonas Vingegaard, su único rival real en la lucha por el maillot amarillo final en los Campos Elíseos de París.
La estrategia de Pogacar para la última semana
Pogacar ha manifestado que su objetivo es mantener la prudencia y la ventaja que ha conseguido. «Estamos listos para luchar contra quien sea, pero sobre todo contra Jonas, que ha demostrado estar muy fuerte. Debemos estar preparados para sus ataques en la montaña», afirmó el ciclista. Reconoció que el recorrido de esta semana, especialmente las subidas al Mont Ventoux y La Loze, le genera cierto temor, ya que son puertos que le resultaron difíciles en el pasado. «Para mí, el Col de la Loze es una de las subidas más duras que he hecho nunca», añadió.
En un momento de reflexión, Pogacar recordó su «peor día» en el Tour, cuando terminó agotado en La Loze y Vingegaard se aseguró la victoria. A pesar de ello, el esloveno se siente confiado y preparado para enfrentar los retos que se avecinan, expresando su deseo de tener mejores piernas que en aquella ocasión. “No me estresa pensar en lo que queda de temporada. Sigo concentrado en el Tour y después decidiré en función de las posibilidades que crea que tengo”, concluyó.
La Vuelta a España y el futuro de Pogacar
Aunque Pogacar se encuentra completamente enfocado en la conquista de su cuarto Tour, no quiso confirmar su participación en la Vuelta a España que se celebrará del 23 de agosto al 14 de septiembre. Esta prueba estaba en su calendario inicial, pero el esloveno ha dejado claro que tomará la decisión sobre su participación una vez finalice el Tour. “En mi cabeza solo están las seis etapas que quedan en el Tour”, reiteró.
Fuera de la lucha por el maillot amarillo, la batalla por el tercer puesto del podio está más abierta tras la retirada del belga Remco Evenepoel en las rampas del Tourmalet. El alemán Florian Lipowitz ocupa actualmente esa posición, a 7’53» del líder, y deberá defender su posición frente al británico Oscar Onley (4º a 9’18»), el francés Kevin Vauquelin (5º a 10’21») y el esloveno Primoz Roglic (6º a 10’34»).
La tercera semana del Tour promete ser una de las más emocionantes de la historia, con la expectativa de que los principales favoritos saquen a relucir su mejor forma en los arduos ascensos que les esperan.