La llegada de La Vuelta a Valladolid ha estado marcada por la controversia y las tensiones políticas, ya que dos manifestantes propalestinos fueron detenidos tras invadir la calzada durante la etapa contrarreloj. Los miembros del colectivo Comuneros interrumpieron el recorrido en un acto de protesta contra la participación de un equipo israelí en la competición, lo que provocó la intervención de la Policía Nacional.
A pesar de la detención de los manifestantes, la prueba se desarrolló sin más incidentes, aunque con una notable presencia policial que garantizó la seguridad del evento. Las protestas han sido un tema recurrente en el contexto de La Vuelta, donde el conflicto en Oriente Medio ha suscitado diversas opiniones y manifestaciones en varias etapas de la carrera.
La etapa contrarreloj, que tuvo lugar el 14 de septiembre de 2023, se celebró con un estricto control de las fuerzas de seguridad, lo que permitió a los corredores completar su recorrido. Los organizadores del evento han expresado su compromiso con el deporte y la convivencia pacífica, aunque la situación política continúa generando tensiones en distintos puntos de España.
Este incidente pone de relieve la polarización en torno al conflicto israelo-palestino y cómo eventos deportivos pueden convertirse en plataforma para la expresión de opiniones políticas. La Vuelta, que atrae a miles de aficionados, se convierte así en un reflejo de las realidades sociales y políticas del momento.