Olle Lundqvist ha sido presentado oficialmente como nuevo jugador del Monbus Obradoiro, y su entusiasmo por el club, sus compañeros y los reencuentros es palpable. El sueco, que se desempeñará principalmente como base, ha manifestado su ilusión por el reto que esto representa, especialmente bajo la dirección de Diego Epifanio, con quien ya ha hablado sobre su evolución en esta nueva posición.
Durante la presentación, Lundqvist se mostró optimista sobre la responsabilidad de jugar como base, destacando que ha acumulado experiencia en esta función en temporadas anteriores: «Para mí es muy divertido. Jugué bastantes partidos el año pasado como base también. No es nada nuevo para mí, pero es la primera vez en los últimos años que voy a ser solo base», comentó. Aunque anticipa que también jugará algunos minutos como escolta, se siente preparado para afrontar el desafío.
La influencia de Epi y la llegada de Westermann
El nuevo jugador del Obradoiro enfatizó que su experiencia de tres años con Epi le facilitará el aprendizaje de las jugadas y sistemas del equipo: «Conozco bastante bien todas las jugadas, todas las posiciones. Esto va a ser más fácil para mí». Además, Lundqvist considera que la incorporación de Léo Westermann será un gran apoyo: «Sabe jugar mejor que nadie. Puedo hablar con él, hacerle preguntas y todo esto. Es bueno para mí».
En cuanto a sus compañeros, se mostró muy positivo sobre la plantilla: «Tenemos una buena plantilla que puede jugar como equipo y esto va a ayudar mucho, porque todos tienen su rol. Todos saben lo que necesitamos hacer para ganar y creo que me gusta mucho el equipo por ahora». También hizo hincapié en el fichaje de su compatriota Denzel Andersson, a quien describió como un «muy buen tirador y defensor».
Expectativas para la temporada y la afición
El primer partido de Lundqvist con el Monbus Obradoiro será contra el Leyma Coruña, un club donde ya es conocido y querido, lo que añade un plus emocional al encuentro: «Con gente allí que son personas muy especiales para mí, tener a la afición allí significa algo, pero vamos a jugar el partido y vamos a ganar, es la idea».
El jugador también destacó que, aunque la preparación para este partido es diferente a la de una temporada regular, el objetivo de ganar siempre estará presente: «Estamos trabajando normal y poco a poco. Ahora es coger sistemas y muchos conceptos, es algo diferente. Esto es completamente diferente. Es más como un entrenamiento que un partido. Pero, obviamente, queremos ganar siempre».
Lundqvist expresó su satisfacción por formar parte del Obradoiro, resaltando que «hay muchas cosas que me gustaban del Obra cuando fiché aquí». La posibilidad de seguir en Galicia es otro aspecto que le entusiasma, ya que ha disfrutado de la rica gastronomía y la belleza de la región.
Por último, el nuevo base del Monbus Obradoiro compartió su opinión sobre el estilo de juego de Epi, que según él se centra en «meter puntos», añadiendo que le gusta correr y crear oportunidades para los tiradores: «Para mí es un baloncesto bonito».
