Jon Rahm ha demostrado que aún tiene mucho que decir en el Open de España, un torneo que se celebra en Madrid. El golfista vizcaíno se presentó este viernes con una actitud decidida, enfrentándose a un recorrido que ha sido modificado recientemente y que presenta un desafío mayor para los jugadores.
El día comenzó con un clima diferente al de la jornada anterior. Si el jueves disfrutaron de sol y una ligera brisa, el viernes las nubes se hicieron más densas, y el viento apenas cruzaba el campo. Las condiciones del green eran complicadas, con una dureza que obligó a muchos jugadores a replantearse sus estrategias de juego. Los greenes escupían las bolas, lo que llevó a los competidores a buscar alternativas para frenar sus tiros, utilizando el leve rough que precede a la zona de putt.
Un inicio prometedor
Rahm, consciente de la importancia de este torneo en su carrera, se mostró sereno y concentrado. Después de una jornada complicada el jueves, donde no logró asentarse en el campo, el vizcaíno comenzó su ronda matutina con confianza. En los primeros hoyos, su juego fluyó, destacando especialmente en el hoyo tres, donde realizó un tiro certero que le brindó su primera oportunidad de birdie.
A pesar de no lograr el birdie en esa ocasión, Rahm se recuperó rápidamente. En los siguientes cinco hoyos, conquistó cuatro banderas, tres de ellas de manera consecutiva, elevando su puntuación a menos tres y abriendo la puerta a la esperanza de un buen resultado final.
Superando los obstáculos
Sin embargo, la senda hacia la victoria no fue sencilla. Dos bogeys consecutivos interrumpieron su racha positiva, reavivando los temores de que el recorrido se convirtiera en un carrusel de resultados. A pesar de este bache, el campeón del US Open y ganador de la chaqueta verde supo reponerse, firmando tres nuevos birdies que revitalizaron sus opciones en el torneo.
Entre sus mejores golpes, destaca una recuperación excepcional en el hoyo seis, donde tras una salida desafortunada que le obligó a penetrar en el bosque, dejó la bola casi dada para un birdie. Además, su destreza en los bunkers, donde parece sentirse en su elemento, fue crucial para mantener su competitividad durante la jornada.
Con el elevado tee del uno abarrotado de aficionados y la espectacular vista del ‘skyline’ de Madrid como telón de fondo, Rahm sigue siendo uno de los favoritos para alzarse con el título en un torneo que podría marcar su regreso a la senda de la victoria. Desde su último triunfo en septiembre de 2022 en la reunión del LIV de Chicago, Madrid se presenta como el escenario ideal para que el golfista vizcaíno vuelva a levantar un trofeo ante su afición.
