El Replasa Beti Onak ha comenzado a escribir una temporada que promete ser histórica, al tener que afrontar hasta cuatro competiciones tanto a nivel estatal como internacional. Este equipo navarro, que se encuentra en su cuarta campaña en la élite del balonmano femenino, ya ha iniciado la preparación para estas nuevas y emocionantes experiencias. Con un intenso calendario por delante, las jugadoras se reunieron el pasado lunes en el polideportivo Hermanos Induráin para dar el pistoletazo de salida a esta aventura.
La única ausencia en esta primera sesión fue la de la brasileña Mariana Costa, quien continúa recuperándose de una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, y se espera que se una al equipo en aproximadamente un mes. En cambio, las internacionales junior Kelly Nnonzie Fonkeng, Estitxu Rodríguez y Libe Arruabarrena participaron en el entrenamiento, aunque las dos últimas requieren días adicionales de descanso tras haber ganado la medalla de plata en el Campeonato Europeo celebrado en Montenegro.
Refuerzos y desafíos por delante
El Replasa Beti Onak ha incorporado a tres nuevas jugadoras para esta temporada: Mica Casasola, una internacional argentina que llega del BM Porriño; Elsa Ventura, central navarra proveniente del Ikasa madrileño; y Maialen Orbañanos, una lateral diestro guipuzcoana que se une tras una operación del ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha. Estas incorporaciones buscan suplir las salidas de Valeska Lovera, Eider Hernández y Adriana Mallo.
El equipo dirigido por Miguel Etxeberria se prepara para un mes de septiembre intenso, comenzando con la Liga Guerreras Iberdrola, que arranca el 30 de agosto en casa frente al Costa del Sol Málaga. Además, disputará la Supercopa Ibérica los días 6 y 7 de septiembre, donde competirá junto a Super Amara Bera Bera y los equipos portugueses Benfica y Madeira.
Expectativas y lesiones
La plantilla del Replasa Beti Onak se siente preparada para afrontar esta nueva realidad de múltiples competiciones, con el objetivo de gestionar adecuadamente la carga de partidos. Etxeberria ha expresado su confianza en el fondo de armario y en las jugadoras que provienen de categorías inferiores para asegurar el éxito del equipo. Sin embargo, la preocupación por las lesiones persiste, ya que Estitxu Rodríguez se sometió a una intervención quirúrgica el 6 de agosto para tratar la hiperhidrosis en sus manos, lo que podría limitar su participación inicial.
Por su parte, Libe Arruabarrena se encuentra a la espera de los resultados de una resonancia magnética tras lesionarse en su rodilla izquierda durante un partido contra Suecia. La pivote guipuzcoana se mostró optimista, esperando que no se confirme una rotura de ligamento cruzado.
Con todos estos elementos en juego, el Replasa Beti Onak se prepara para una de las temporadas más emocionantes de su historia, en la que buscará no solo competir, sino también dejar una huella significativa en el balonmano femenino.
