El Espanyol ha demostrado su capacidad de resistencia al vencer al RCD Mallorca por 3-2 en un emocionante encuentro celebrado en Cornellà de Llobregat. A pesar de comenzar el partido con un dominio claro y un marcador de 2-0, el equipo catalán enfrentó adversidades tras la expulsión polémica de Pere Milla y el posterior empate del Mallorca, pero logró recuperar la ventaja con un gol decisivo de Kike García.
Un inicio prometedor para el Espanyol
El encuentro comenzó con un Espanyol hambriento de victoria, que rápidamente mostró su superioridad. Tras 20 minutos de juego, Milla abrió el marcador con un gol que llegó tras una brillante asistencia de Carlos Romero. Posteriormente, el equipo amplió la ventaja con un segundo gol de Roberto, que llegó tras un centro de Dolan. El Mallorca, por su parte, se encontraba en una situación complicada, con solo un punto en la clasificación y lidiando con la controversia en torno a su capitán, Dani Rodríguez, quien había sido suspendido.
Sin embargo, el panorama cambió antes del descanso. En un giro inesperado, el árbitro Hernández Hernández mostró una tarjeta roja directa a Milla, lo que dejó al Espanyol con diez jugadores y cambió la dinámica del partido. Poco después, el Mallorca recortó distancias con un penalti transformado por Muriqi, lo que aumentó la presión sobre el equipo local.
Resiliencia en circunstancias adversas
A pesar de la desventaja numérica, el Espanyol no se rindió. Manolo González, el entrenador, hizo ajustes tácticos para reforzar el centro del campo, introduciendo a Charles Pickel en su debut con el equipo. El Mallorca empató rápidamente con un cabezazo de Muriqi, pero el equipo perico mantuvo la fe y continuó buscando el gol de la victoria.
En un momento decisivo, Kike García fue derribado en el área, lo que resultó en un penalti a favor del Espanyol. El delantero se encargó de ejecutar el lanzamiento y, con gran precisión, selló el 3-2 que aseguraba la victoria. Con este triunfo, el Espanyol suma diez puntos de los últimos doce posibles, consolidándose en la tercera posición de la tabla, igualando a puntos con el FC Barcelona.
La próxima jornada se presenta desafiante, ya que el Espanyol se enfrentará al líder, el Real Madrid, en el estadio Santiago Bernabéu. El equipo de Cornellà ha demostrado que, a pesar de las adversidades, su espíritu competitivo se mantiene intacto y está preparado para continuar su lucha en la Liga.
