El 5 de septiembre de 2025, Abraham Gómez, máximo goleador del Xerez DFC la pasada temporada, ha anunciado su despedida a través de una emotiva carta publicada en sus redes sociales. El delantero, que llegó al club procedente del Pozoblanco, ha sido clave para que el equipo mantuviera la categoría en la Segunda RFEF, destacándose como uno de los principales artífices de su éxito en el campo.
Gómez, que desde finales de febrero había manifestado su intención de ingresar en la Academia de la Policía Nacional en Ávila, aprobó las pruebas necesarias y a partir de julio comenzará su formación en Castilla y León. Sin embargo, no ha sido hasta ahora cuando ha decidido dirigirse públicamente a los aficionados del Xerez.
Una carta de agradecimiento y despedida
En su misiva, Abraham expresa: «Querida familia xerecista, ahora sí que sí toca escribir una de esas cartas que nunca son fáciles. Pido disculpas por si he tardado mucho, pero creo que hasta que no quedara todo cerrado y acordado, no iba a poder dedicar mis mejores palabras.» Desde su llegada al club, el futbolista ha sentido el apoyo incondicional de la afición y el vestuario, lo que le motivó a competir con dedicación y compromiso.
El delantero enfatiza su orgullo por haber contribuido con goles y esfuerzo al equipo, recordando momentos inolvidables en el estadio de Chapín y fuera de casa, siempre junto a los seguidores. «Quiero dar las gracias de corazón a mis compañeros, a ambos cuerpos técnicos, a la dirección deportiva y a todas las personas del club que hacen que todo funcione, y sobre todo, a la afición, que ha estado siempre, en las buenas y en las malas», añade.
Nuevas metas y un futuro incierto
Abraham también aclara los motivos de su marcha, asegurando que «esta decisión es profundamente personal» y que su nueva etapa de formación y servicio es incompatible con el fútbol profesional en este momento. Sin embargo, el jugador no se despide del fútbol de forma definitiva, afirmando que «no es un adiós al fútbol para siempre, sino un hasta luego responsable». A pesar de su alejamiento del deporte, espera regresar algún día al mundo del fútbol, ya sea en el campo o en las gradas.
Para concluir su carta, el futbolista agradece al club por haberle hecho sentir como uno más desde el primer día y despide a la afición con un emotivo mensaje: «Gracias, xerecistas, por tanto cariño y respeto. Y gracias, fútbol, por todo lo que me has dado y por lo que me seguirás transmitiendo desde el otro lado. Nos veremos en las gradas. Forza Xerez».