Los padres de los alumnos del colegio Inés de Suárez, ubicado en Plasencia, han expresado su descontento tras una reunión en la que se informó que la calefacción del centro no está funcionando. Esta situación ha levantado una oleada de indignación entre los padres, quienes consideran que la falta de calefacción es inaceptable, especialmente en un momento en el que se están evaluando otras mejoras, como la instalación de placas solares.
Uno de los padres manifestó su sorpresa ante la situación: «Me parece increíble que estén valorando poner placas solares y pintar cosas y que lo básico como calefacción no esté cubierto». La preocupación es palpable, ya que los padres esperan que el problema se resuelva antes de la llegada del frío. «Si no se actúa, los padres nos organizaremos. No hay derecho a exponer a niños a tener unas aulas precarias; estamos empezando el curso», añadió.
Respuesta de la Junta de Extremadura
En respuesta a las quejas, la Consejería de Educación de la Junta de Extremadura ha señalado que el colegio tiene concedida una subvención de 98 809,66 euros destinada a mejorar la eficiencia energética del centro. Mientras se desarrolla el proyecto y se llevan a cabo las obras necesarias, la delegación provincial de Educación se ha comprometido a acometer el arreglo de la caldera que abastece de calefacción al colegio.
Además de la situación de la calefacción, los padres han señalado otro problema que afecta a la infraestructura del colegio: un árbol que imposibilita el uso del arenero. La solicitud de tala fue rechazada por el centro, que argumentó que se trata de un refugio de estorninos y, por tanto, no se puede talar. La Junta, al consultar al ayuntamiento, recibió la respuesta de que existe una normativa que debe ser respetada en este caso.
Los padres continúan esperando soluciones rápidas y efectivas para que sus hijos puedan disfrutar de un entorno escolar adecuado y seguro.