La lluvia de meteoros de las Perseidas, conocida popularmente como las «lágrimas de San Lorenzo», comenzará a finales de julio y se extenderá hasta el 20 de agosto, con su punto álgido previsto para la noche del 12 al 13 de agosto. Faustino Organero, presidente de la Fundación Astrohita, ha destacado la importancia de observar este fenómeno con «ojos de calma y curiosidad», invitando al público a disfrutar de un espectáculo natural único.
Organero ha explicado que, aunque las lluvias de meteoros pueden verse durante todo el año, las Perseidas son las más reconocidas, principalmente por su coincidencia con el verano y las vacaciones. Este fenómeno se produce cuando la Tierra atraviesa los restos del cometa Swift-Tuttle, lo que provoca la aparición de meteoros en la atmósfera.
Momentos ideales para la observación
El presidente de la Fundación ha señalado que el mejor momento para disfrutar de las Perseidas es durante la segunda mitad de la noche, cuando la Tierra está más orientada hacia la corriente de partículas. Para una experiencia óptima, ha recomendado alejarse de las ciudades y buscar lugares oscuros, así como llevar ropa de abrigo y repelente para insectos. «Es fundamental adoptar una posición cómoda y mirar al cielo con paciencia, ya que las estrellas fugaces aparecen de manera impredecible», ha añadido.
Este año, las condiciones para la observación serán especialmente favorables, gracias a la escasa iluminación de la luna durante las noches del máximo, lo que permitirá una visibilidad mucho mayor de los meteoros. La Fundación Astrohita, situada en La Puebla de Almoradiel (Toledo), abrirá su complejo astronómico «La Hita» los días 12, 13 y 16 de agosto. Durante estas jornadas, los asistentes no solo podrán admirar el espectáculo celeste, sino que también disfrutarán de música ambiental y explicaciones guiadas a través de telescopios, facilitando un recorrido por las principales estructuras visibles en el cielo nocturno.
Se espera la asistencia de más de un centenar de personas cada noche, lo que refleja el creciente interés por la astronomía y la observación de fenómenos celestiales. Organero ha invitado a todos a levantar la vista y disfrutar del cielo estival, recordando que «cada agosto organizamos una actividad para visualizar la estructura de la galaxia».
Actividades astronómicas adicionales
No obstante, el firmamento ofrece mucho más que lluvias de estrellas. El 26 de julio, el observatorio realizará una iniciativa llamada «Ruta de las nubes del té», centrada en la constelación de Sagitario. Esta constelación, que puede interpretarse como un centauro o, de forma más creativa, como una tetera, será el punto de partida para una propuesta en la que las nebulosas se asemejan a vapor que emana de un «recipiente celeste». Durante esta actividad, no se descarta la posibilidad de observar algunas Perseidas tempranas, lo que añadiría un aliciente adicional a la experiencia.
Organero ha concluido su intervención afirmando que hay numerosas maravillas astronómicas más allá de lo espectacular, y que simplemente al levantar la vista se puede sentir la profundidad del universo y la insignificancia de nuestra existencia.