El Parque Hernández ha sido el escenario de una visita guiada el pasado 13 de diciembre, a pesar de las inclemencias del tiempo, donde numerosos ciudadanos y amantes del patrimonio local se han reunido para redescubrir este emblemático espacio verde de Melilla. La actividad, organizada por la Asociación Melilla para la UNESCO, permitió a los asistentes disfrutar de un itinerario diseñado para destacar la riqueza natural y monumental del parque, reconocido desde 2007 como jardín histórico por la UNESCO.
Los participantes, equipados con paraguas y una actitud decidida a disfrutar, fueron guiados por Juan José Florensa, un técnico en turismo que aportó un valor añadido a la experiencia al compartir secretos botánicos y escultóricos del entorno. Su presentación, con un estilo que evocaba a un Indiana Jones melillense, sumergió a los asistentes en la historia y el sentimiento que rodea este pulmón verde.
Historia y características del Parque
Situado en el corazón del Ensanche Modernista y flanqueado por la Plaza de España, el Parque Hernández no es solo un jardín, sino un espacio con un rico trasfondo histórico. Su origen se remonta a 1902, cuando fue inaugurado por el comandante general Venancio Hernández Fernández. A lo largo de los años, este parque se ha consolidado como un punto de encuentro para los ciudadanos, un lugar donde se celebran ferias y eventos, y que fue rehabilitado en 2010.
Entre los elementos más destacados se encuentran la entrada monumental diseñada en 1914, las esculturas de Guzmán el Bueno y fuentes como la de las Conchas y la Flor de Cala. También fue objeto de especial atención el paseo central, conocido como el de los Enamorados, así como el jardín ovalado, que junto a una gran araucaria, sirve como hito vegetal del espacio.
Un compromiso con la conservación
La jornada, a pesar de la lluvia, ofreció una experiencia enriquecedora que unió historia, patrimonio y naturaleza. La visita no solo resaltó la belleza de este lugar icónico para los melillenses, sino que también recordó el compromiso con la conservación de un espacio que, más de un siglo después de su creación, sigue siendo un referente de identidad local y orgullo ciudadano.
La actividad concluyó el seminario Patrimonio Cultural y Natural de la Ciudad Autónoma de Melilla, que comenzó el 8 de noviembre con un recorrido por la Melilla modernista y continuó el 22 de noviembre con una visita a Melilla La Vieja. Este ciclo de actividades ha permitido a los ciudadanos conectar con su historia y naturaleza, fomentando un mayor aprecio por su patrimonio.
