Una nueva especie de ballena extinta ha sido descubierta en Australia. Esta ballena, denominada Janjucetus dullardi, medía aproximadamente dos metros y vivió en las costas australianas hace unos 25 millones de años. El hallazgo se produjo a raíz de un fósil encontrado en el año 2019 en la costa de Jan Juc, al sureste de Melbourne, como informó el Museo Victoria en un comunicado el pasado martes.
El análisis de los restos fósiles permitió a los paleontólogos concluir que los dientes y huesos auditivos del cetáceo eran lo suficientemente distintos como para clasificarlo como una nueva especie de ballena dentada. En un vídeo del museo, Ruairidh Duncan, estudiante de doctorado en Paleontología en la Universidad de Monash, señaló que «sabemos por los fósiles que tenía una boca llena de dientes muy puntiagudos y afilados».
Adaptaciones únicas para la caza
A diferencia de otros cetáceos actuales que utilizan la ecolocalización para cazar, los científicos sugieren que el Janjucetus dullardi dependía de su aguda visión. «Cazaba usando sus ojos, que eran muy grandes para permitirle seguir a las presas», añadió Duncan, quien coautora el estudio junto al curador principal del museo, Erich Fitzgerald.
Esta especie se suma a otras ballenas dentadas extintas descubiertas en Australia, como Mammalodon colliveri y Janjucetus hunderi, que fueron identificadas en 1932 y 2006, respectivamente. Todas ellas vivieron durante el Oligoceno Tardío, un periodo que abarca entre 26 y 23 millones de años atrás y que estuvo marcado por un clima cálido en la costa sureste australiana.
Extinción y cambios climáticos
Se cree que el Janjucetus dullardi habitaba en aguas cálidas, pero el posterior enfriamiento del planeta condujo a una bajada del nivel del mar, lo que resultó en la pérdida de su hábitat costero. Este fenómeno contribuyó a la extinción de esta y otras especies marinas que no pudieron adaptarse a las nuevas condiciones ambientales.
El descubrimiento de esta ballena extinta no solo amplía nuestro conocimiento sobre la evolución de los cetáceos, sino que también ofrece una ventana a la diversidad de vida marina que existió en el pasado. La investigación se ha publicado en la revista zoológica de la Sociedad Linneana, destacando la importancia de los fósiles en la comprensión de la historia natural de nuestro planeta.
